Ayudar a los padres latinos e inmigrantes
Las familias pueden abocarse a una oficina del Departamento de Educación de la Arquidiócesis para recibir orientación sobre las aplicaciones
Placa conmemorativa de un playground en homenaje a Monseñor David L. Cassato, rector de St. Athanasius, en Brooklyn. Crédito: Carmen Molina T.
Si usted es padre o madre de familia y quiere inscribir a sus hijos en una escuela católica pero no sabe cómo hacerlo o dónde empezar, el Departamento de Educación de la Arquidiócesis de Nueva York tiene una oficina donde pueden ayudarle a realizar todo el proceso.
Se trata del Programa para Familias Hispanas (Latino Outreach) a cargo de María Zamorano. “Yo trabajo asistiendo a las familias hispanas en la transición de escuelas públicas de distrito y chárter que quieren transferirse a escuelas católicas”, afirmó.
El programa fue creado en 2016 aunque antes de eso la Arquidiócesis ya contaba con un servicio dedicado a ayudar a las familias hispanas e inmigrantes.
Zamorano visita las iglesias después de las misas y habla de las bondades del sistema educativo católico, como el tamaño reducido de las clases, la integración de la educación religiosa y la preparación académica de alto nivel.
Hay varios motivos por los cuales las familias deciden cambiar a sus hijos de escuelas públicas y chárter a centros católicos. La funcionaria dijo que entre ellos figuran el desempeño académico, ya que no ven el progreso de sus hijos en otros lugares y la seguridad, ya que algunas residen en vecindarios inseguros o sus hijos han sido víctimas de matoneo (bullying).
“Muchas familias buscan mayor sentido de comunidad, porque las escuelas donde estudian sus hijos son grandes y en las escuelas católicas por ser más pequeñas hay una atención más personalizada”, dijo.
El primer paso es llenar las solicitudes de admisión para la o las escuelas que les interesan ya sea por conveniencia geográfica o de seguridad para sus hijos; la Arquidiócesis todavía está recibiendo peticiones para el año escolar 2018-2019.
Las familias reciben la asistencia para ordenar la documentación y los datos que deben presentar y luego la orientación para llenar la aplicación para la asistencia financiera.
Según Zamorano, en el sistema de escuelas católicas no hay becas completas pero la mayoría de las familias reciben algún porcentaje de ayuda financiera (family grant). “En promedio, la educación de cada estudiante cuesta aproximadamente $4,750 y en algunas más de $6,000. La ayuda máxima que se otorga es aproximadamente de $3,200”, indicó.
En la oficina aplican la ayuda dependiendo de la categoría familiar. Por ejemplo una familia de dos (una madre o un padre y un hijo o hija) con ingreso menor a $91,000 anuales recibe ayuda; asimismo una familia de tres (dos padres y un hijo o hija) con ingresos menores de $108,000 y una familia de cuatro (dos padres y dos hijos) con ingresos menores de $126,000 también.l
