Honduras sí avanza

La selección de futbol de Honduras clasificó a la ronda semifinal del Torneo Preolímpico de la Concacaf al vencer ayer por 2-0 a Trinidad y Tobago en el Home Depot de Carson.

Con su victoria, los catrachos quedaron instalados en la segunda posición del Grupo B y el sábado enfrentarán en Kansas City a El Salvador, primer lugar del Grupo A, para definir uno de los boletos a las Juegos Olímpico de Londres 2012.

El encuentro de ayer fue controlado, pero sin jugar bien, por parte de los hondureños.

En los primeros 45 minutos el cuadro centroamericano tuvo la posesión del balón, aunque falto de creatividad y decisión para romper el cerco defensivo del equipo caribeño.

Mostrando poco compromiso para reflejar en la cancha su superioridad táctica, los hondureños se dedicaron a pasear lateralmente el balón sin imprimir profundidad en sus avances.

El equipo catracho, que dirige el entrenador colombiano, Luis Fernando Suárez, no mostró en ningún momento hambre de demoler a un rival muy limitado y cuyo mayor recurso es el choque físico.

A pesar del mal juego que estaba brindando, Honduras se encontró con la anotación al 35′, gracias a la inseguridad del portero de Trinidad y Tobago, que durante todo el torneo mostró falta de calidad para este tipo de eventos.

La anotación se dio cuando Wilmer Crisanto lanzó un centro al área que fue rebanado por el defensa Karreem Moses.

Con la pelota en al aire, el arquero Andre Marchan tenía todo a su favor para aferrase al esférico , pero no midió bien su salto y el balón cayó en los botines de Eddie Hernández para inaugurar el marcador.

La anotación fue coreada por los apenas dos mil aficionados que observaron el partido en las gradas.

Con el gol a su favor, los hondureños se fueron tranquilos al descanso, a pesar de la poca efectividad mostrada en la cancha.

Honduras amarró el partido al 68’con un centro de Andy Najar que fue cabeceado por Eddie Hernández para que el balón cayera en los pies de Antony Lozano, quien con la pierna derecha fusiló al arquero de Trinidad y Tobago.

Los trinitarios tenían la obligación de ganar el encuentro para acceder a la ronda de semifinales, pero ni siquiera esa motivación animó a su entrenador, Angus Eve, a modificar el sistema de juego que utilizó durante todo el torneo.

Los caribeños conformaron dos líneas bien marcadas de cuatro defensas y cuatro mediocampistas, dejando sólo a un hombre en la punta.

La falta de alternativas tácticas terminó por pesarle mucho al cuadro caribeño que se despidió de Carson con dos derrotas, un empate, 10 goles en contra y sólo uno a favor.