Primer Ministro italiano no continuará después del 2013
Cabe recordar que Mario Monti llegó al poder tras la salida de Silvio Berlusconi y no respondió a un ejercicio de elección popular.
Bruselas, 10 de Julio.- El primer ministro italiano y titular de Finanzas, Mario Monti, descartó hoy mantenerse al frente del Gobierno de Italia más allá de 2013, cuando expira la actual legislatura y se celebrarán elecciones generales.
“Excluyo considerar una experiencia de gobierno, en lo que a mí respecta, que vaya más allá del término de las próximas elecciones. Naturalmente soy, y seguiré siendo, miembro del Parlamento como senador vitalicio”, señaló Monti en una rueda de prensa al final de la reunión de ministros de Finanzas de la UE celebrada en Bruselas.
El excomisario europeo aceptó liderar un Ejecutivo de tecnócratas el pasado mes de noviembre, tras la dimisión de Silvio Berlusconi ante la presión ejercida por los mercados, que disparó la prima de riesgo italiana hasta máximos históricos y puso al país al borde del rescate.
El Gobierno de Mario Monti asumió el encargo de llevar a cabo importantes reformas económicas para devolver a Italia a la senda del crecimiento y ponerla fuera de riesgo, hasta finales de la presente legislatura.
Sin embargo, Monti no había aclarado hasta ahora su futuro político más allá de la cita electoral de 2013.
Por otra parte, el también ministro de Finanzas consideró que Italia no tendrá que recurrir a un rescate y reiteró el interés de Roma por que se realice una intervención en los mercados de la deuda para relajar la presión sobre los países con dificultades.
También lamentó las reticencias mostradas por Finlandia y Holanda la semana pasada sobre la recapitalización directa de los bancos en dificultades, una posibilidad pactada por los Veintisiete en la última cumbre europea, a condición de que se ponga en marcha un supervisor bancario único.
“Creo que los presidentes de la Comisión Europea y del Consejo han reaccionado adecuadamente al recordar a todos que es un acuerdo unánime”, por lo que está fuera de lugar que cualquier país a título individual cuestione un pacto sellado por el jefe de Gobierno, indicó Monti.