¡Te sorprenderás! Por qué la dieta paleo no es tan efectiva como se cree
Los microbios dentro de nuestro intestino pueden revelar detalles ocultos de nuestra salud física y mental
La famosa dieta paleo ha estado vigente por muchos años, como una corriente importante en las tendencias para bajar de peso. Lo cierto es que hoy en día existen muchas alternativas de pautas dietéticas, que hacen que sea algo abrumador tomar las mejores desiciones. La buena noticia es que la ciencia no miente y se hace presente, para ayudarnos a tomar las mejores decisiones.
Esta vez, los científicos investigaron cuán similar pudo haber sido la flora intestinal de los pueblos antiguos al microbioma intestinal humano moderno. Es cierto que en los últimos meses hemos escuchado mucho sobre el papel tan fundamental que juega una flora intestinal sana en la salud general, no solo digestiva. El microbioma intestinal se refiere a la diversa comunidad de microbios intestinales dentro de nuestro sistema gastrointestinal.
Para descifrar cómo han cambiado estas comunidades a lo largo de la evolución humana, los científicos estudiaron muestras fecales de uno los antiguos neandertales, para reconstruir su microbioma intestinal y su dieta. Un dato impresionante, es que según los investigadores, estas pueden ser las muestras fecales más antiguas jamás identificadas pertenecientes a una especie humana. Probablemente te estés preguntando por qué es tan importante y cuál es la relación de todo esto con la dieta paleo. Pero vamos por partes, la idea detrás de esta investigación es comprender qué define al “microbioma humano central” y comprender cómo nuestro entorno cambiante puede, a su vez, afectar la microbiota intestinal.
El estudio fue encabezado por Stephanie Schnorr, quien es investigadora postdoctoral en la Universidad de Nevada, en Las Vegas. Schnorr es una reconocida profesionista que durante años se ha dedicado a estudiar cómo la dieta humana y el microbioma intestinal se relacionan con la evolución. Recientemente declaro para Inverse, que estos estudios más allá de profundizar sobre detalles importantes de la dieta paleo, son un trabajo de investigación que podrían ayudarnos a aprender algo fundamental sobre la evolución de los humanos y la relación simbiótica que tenemos con nuestro entorno. De tal modo que en lugar de modificar nuestras dietas para perseguir un ideal paleolítico que puede basarse más en la fantasía que en la realidad, podríamos ver cómo nuestra relación cambiante con el medio ambiente altera nuestra salud.
Lo cierto es que la investigación sobre la relación entre el microbioma intestinal y otros aspectos de la salud humana se ha disparado en la última década. El estudio encabezado por Schnorr y su equipo ha llamado de manera especial la atención, ya que adoptan un enfoque diferente a lo antes visto. ¿En que se basó el estudio? El equipo de científicos realizó un análisis de ADN de sedimento fecal neandertal confirmado para identificar qué bacterias florecían en las entrañas de estos pueblos antiguos. El equipo utilizó un método de análisis genético llamado análisis metagenómico de escopeta, en el que se extrajo y analizó ADN bacteriano antiguo de las muestras. En total, el equipo identificó 124.592.506 antiguas secuencias de ADN bacteriano. Cabe mencionar que durante el proceso, los investigadores tuvieron que tener cuidado de evitar que sus propias bacterias humanas modernas contaminen las muestras antiguas.
Los hallazgos fueron sorprendentes, el equipo de investigación identificó muchas de las mismas microbiotas que se pueden encontrar en el intestino humano hoy, incluida la microbiota que habría permitido a los neandertales extraer energía extra de la fibra dietética. Los investigadores lo traducen como un hecho que fortalece la relevancia de los alimentos vegetales en la evolución humana, lo cual nos hace entender mucho más a fondo sobre los beneficios que trae consigo seguir una dieta basada en plantas. No en vano en los últimos meses es el estilo de alimentación más recomendado por especialistas en medicina y nutrición. Recordemos que la dieta paleo, es un plan dietético basado en alimentos similares a los que se podrían haber consumido durante la era Paleolítica, que data de hace aproximadamente 2,5 millones a 10.000 años. Por lo tanto es una dieta que suele incluir como base el consumo de carnes magras, pescado, frutas, verduras, frutos secos y semillas, alimentos que en el pasado se podían obtener mediante la caza y la recolección. La dieta paleo limita los alimentos que se volvieron comunes cuando surgió la agricultura, entre los que se destacan productos lácteos, legumbres y granos.
Lo más relevante de este estudio, es que se comprobó que a medida que estas bacterias han disminuido, también ha aumentado la incidencia de problemas autoinmunes e inflamatorios en los occidentales. Lo cual se asocia con el aumento de enfermedades crónicas y degenerativas.
También este estudio no solo sugiere el beneficio histórico para la salud, de estos microbios en desaparición. Si bien estas bacterias no revelan el contenido exacto de las dietas de los neandertales, Schnorr dice que los datos preliminares sugieren que las ideas estereotipadas sobre los neandertales como carnívoros inveterados no son la verdad. Esto desafía la imagen que se ha propuesto antes de que los neandertales solo comían carne, en realidad vivían en un entorno complejo con una dieta mixta compleja.
Como conclusión es importante decir que la ciencia tiene más trabajo por hacer. Los científicos podrán continuar aprendiendo sobre cómo las diferentes bacterias se conectan con el comportamiento y la salud humana, y cómo ha cambiado con el tiempo. Finalmente hoy en día sabemos que el microbioma intestinal es considerado el “segundo cerebro”; interviene en absolutamente todo lo que sucede en nuestro cuerpo. Es clave para tener un sistema inmunológico fuerte, prevenir todo tipo de enfermedades, gozar de un peso saludable, mejorar el funcionamiento cognitivo, bajar de peso e inclusive influye en el estado de ánimo.