El escándalo, una prueba para los republicanos
El escándalo por el cierre intencional de varios carriles del puente interestatal Washington, es la más dura prueba hasta ahora para el gobernador de Nueva Jersey y sin duda será un factor que pesará en la decisión para elegir al candidato presidencial republicano para 2016.
Christie, quien ganó la reelección en noviembre con un 60% de las preferencias y un 51% del voto hispano en el estado, está considerado en las encuestas como uno de los posibles candidatos más fuertes del Partido Repúblicano junto con los senadores Ted Cruz, de Texas y Marcos Rubio, de Florida.
Christie apoyó la ley de Igualdad de Matrícula que permite a los estudiantes universitarios indocumentados pagar lo que se considera como gasto estatal por sus estudios.
Analistas como Geoffrey Skelley del Centro para Política de la Universidad de Virginia están seguros que tanto los equipos de Rubio como de Cruz “usarán el escándalo para retratarlo como un matón del estilo de la vieja política de Nueva Jersey”.
Ayer Rubio dijo que por ahora tiene tres opciones para 2016: buscar la reelección en el Senado, postularse a otro cargo o regresar al sector privado.
Una encuesta realizada en diciembre por CNN/ORC International mostró que un 48% de los votantes registrados apoyaban a Christie como candidato presidencible. El ex candidato a vicepresidente Paul Ryan registró un 38%, mientras Cruz sacó un 28% y Rubio alcanzó un 27%.