Miles de ‘Diablos Rojos’ invaden el Rose Bowl
El Rose Bowl se volvió un infierno con la presencia de los “Diablos Rojos”.
Los hinchas del Manchester United tiñeron de rojo, en un su mayoría, las gradas del coloso de Pasadena.
Las puertas abrieron a las 5:30 p.m., pero el aroma de futbol comenzó a respirarse desde la estación del Metro en el Sur de Pasadena.
Las calles se confundían con las mismas de Manchester, con aficionados enfundados con la casaca roja buscando un bar para calmar el calor con una cerveza y matar el tiempo.
Los fans del United aprovecharon para ver a su equipo y más de 86 mil almas poblaron el graderío.
Martin Pineda, hincha de los Red Devils se hizo presente hora y media antes que se abrieran las puertas del estadio.
“Me siento muy feliz de estar aquí. Vine con mis amigos y novia”, dijo emocionado.
“Las entradas me han costado 50 dólares cada una, pero vale la pena”, comentó el aficionado.
Muchos seguidores que portaron el dorsal 14 no se sintieron contentos al ver que Javier “Chicharito” Hernández no estuvo en el once inicial.