Ciérrale la puerta a la violencia

Cómo proteger a tu familia y a ti misma de los mensajes negativos de los medios

La violencia indirecta que recibimos a través de los medios contribuye a la disociación con el sufrimiento ajeno.

La violencia indirecta que recibimos a través de los medios contribuye a la disociación con el sufrimiento ajeno. Crédito: <copyrite>Shutterstock</copyrite><person>< / person>

Redacción

Pagamos dinero para ver a gente que se mata entre sí en las pantallas de cine; les compramos videojuegos a los niños donde el protagonista es un psicópata criminal. Uno de los deportes favoritos en EE.UU. es el fútbol americano, basado en golpes y ataques.

“La creciente tolerancia y ansia de violencia en la sociedad son aterradores”, opina L. Craig Williams, experto en el tema y autor de “El Cuarto Ejército” .

El aumento de la violencia indirecta es paralelo a la creciente deshumanización a la que estamos expuestos en los medios.

Los reality shows, por ejemplo, exponen la angustia y la tragedia personal de otros para nuestro entretenimiento i diversión. Y ni que hablar de las imágenes que encontramos en la internet.

“No debería sorprendernos el hecho de que cada vez ocurran más tiroteos y masacres en escuelas y otros lugares públicos, más incidentes de ira en la carretera, e incluso más crímenes atroces cometidos por menores”, dice Williams.

“Nos estamos habituando a la violencia y perdiendo la apreciación por el valor de cada vida humana”, agrega.

¿Cómo podemos protegernos a nosotros mismos y a nuestra familia de la deshumanización que causan los medios de comunicación?

Compartimos contigo algunos consejos

Medios chatarra

Así como evitas darle comida chatarra a tus hijos, evita exponerlos a medios de comunicación negativos.

Probablemente no le sirvas a tus pequeños golosinas y leche con chocolate para el desayuno, pizza para el almuerzo y un plato de papas fritas con queso para la cena.

Del mismo modo, evita los medios basura, fomenta las discusiones familiares edificantes y promueve la lectura.

Los niños instintivamente siente curiosidad y asombro. Habla con ellos de temas de la vida, sin temor a responder preguntas “difíciles”, o reconocer cuando no sabes la respuesta. Infórmense juntos.

¿Adicta a la violencia indirecta? Ejercita tu empatía

En lugar de encontrar placer en las desgracias ajenas, evalúa los motivos que te llevan a apoyar la explotación de las personas emocionalmente frágiles. Piensa que esa mujer, hombre o niño expuesto en el reality show podría ser tu hija, hermana o amigo.

Lee un libro

Seamos honestas ¿Cuándo fue la última vez que leíste una buena historia de principio a fin?

Dedicarte un tiempo a ti misma, haciendo una actividad placentera como embarcarte en una aventura de ficción, es beneficioso y edificante.

Si no has leído por un tiempo, busca historias cortas para empezar, hasta que puedas concentrarte en historias más largas.

No sólo es un escape divertido, sino que beneficiará a tu cerebro, que necesita tanto ejercicio como el resto de tu cuerpo.

Ayuda a quienes te rodean

Una forma de violencia indirecta es la disociación con la persona abusada.

Presta atención a los miembros de su familia; a tu vecino, que pudo haber tenido un mal día.

¿Has notado que cuando sonríes y eres amable con los demás, la gente a su vez responde y te trata mejor?

Como diría el viejo adagio indio: Trata de caminar unas millas en los mocasines del prójimo, y así entenderás cómo se siente

lcraigwilliams.com

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