Organizaciones civiles rompen récord de donaciones tras las elección de Donald Trump

La generosidad pública se está volcando hacia organizaciones que luchan por los derechos civiles de los estadounidenses, de los inmigrantes y de minorías, área en las que el nuevo presidente ha prometido actuar en forma controversial.

Hace una semana, el republicano Donald Trump ganó las elecciones a la presidencia de Estados Unidos y, desde entonces,  diversas organizaciones de defensa de las mujeres, los derechos civiles y los inmigrantes, han recibido entre cientos y miles de donaciones de dinero y ofertas de voluntariado de parte del público.

La Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU= nacional dijo hoy que ha recibido US$120,000 donativos de dinero, para un total de 7.2 millones de dólares en nuevos ingresos. La organización tiene membresías y recibe fondos de diversas fundaciones, pero su director ejecutivo, Anthony Romero, dijo hoy que lo de estos días ha sido inusual.

“Este nivel de apoyo en apenas unos días es el mayor que hemos visto en nuestra historia y es mayor que lo que vimos luego del 11 de Septiembre de 2001“, dijo Romero.

Dijo además que la organización usará los fondos para “proteger los derechos civiles de todos los estadounidenses” y aseguró que entre sus primeras prioridades está “proteger a los “dreamers” que recibieron DACA, resistir cualquier intento de deportaciones masivas, defender los derechos de los estadounidenses gays y transgénero y detener las prácticas de “stop and frisk” de departamentos policiales”.

En Los Ángeles, la Coalición de Derechos Humanos de los Inmigrantes, CHIRLA, ha recibido 325 donativos desde el pasado jueves, que individualmente van desde los 5 dólares hasta los 2000, dijo Jorge Mario Cabrera, portavoz de la organización.

“Y aún faltan cheques por contabilizar”, dijo Cabrera. “Esto es muy inusual porque estamos hablando de que lo normal son 2 a 3 donativos por semana”.

CHIRLA ha recibido “cientos y cientos” de llamadas de personas de la comunidad inmigrante haciendo preguntas sobre el futuro de sus vidas en Estados Unidos y posibles medidas migratorias del presidente electo. Pero también, dijo Cabrera, muchas llamadas de odio e insultos.

“El dinero se usará para financiar talleres, extender las horas de abogados dispuestos a hacer consultas, brindar algo a los voluntarios, etc”, dijo el portavoz.

Algunos de los donativos llevan consigo una ironía, como los que se apuntaron para donaciones mensuales en Planned Parenthood (PP), la organización que ofrece atención médica reproductivas, contraceptivos y pruebas contra el cáncer a mujeres en todo el país, a nombre del nuevo vicepresidente electo, el ultra conservador Mike Pence.

Pence y otros republicanos han liderado una campaña de alto perfil en contra de PP porque entre sus diversos servicios, realizan abortos y aunque el año pasado el Congreso aprobó una medida para quitar los fondos federales que las clínicas reciben,el presidente Obama lo vetó.  Donald Trump ha prometido apoyarlo.

El National Immigration Forum  NIF y el Fondo Méxicoamericano para la Defensa Legal y Educación MALDEF, son dos de las organizaciones que también reportaron hoy haber recibido cientos de donaciones.

Ali Noorani, director ejecutivo de NIF, dijo que su organización ha recibido unas 250 donaciones desde los comicios y que también mucha gente ha llamado para ofrecerse de voluntaria en diferentes ciudades. “Creo que es obvio que la gente quiere ser parte de la solución”.

NIF aboga y crea coaliciones de grupos de negocios, religiosos y de agencias policiales para empujar en favor de soluciones al tema migratorio. 

MALDEF, organización que como ACLU usa los tribunales y las demandas legales para luchar contra políticas que dañan los derechos civiles de la comunidad, ha recibido unos 80,000 dólares en donaciones por medio de su sitio web, dijo su portavoz Sandra Hernández.

El presidente de MALDEF Tom Saenz fue uno de los que argumentó ante la Corte Suprema en favor de DAPA y DACA y que en años anteriores logró exitosos casos en contra de diversas medidas anti inmigrantes. 

El presidente electo centró buena parte de su campaña en anunciar deportaciones masivas de inmigrantes, de las que luego se ha retractado parcialmente, aunque continúa ofreciendo expulsar a 2 o 3 millones de personas que según el, son indocumentados delincuentes peligrosos.

Las cifras oficiales, sin embargo, revela un número mucho menor de indocumentados convictos de un delito grave.

En esta nota

derechos civiles Donald Trump Elecciones 2016
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain