Les dan tilapia por huachinango

Detectan una serie de violaciones en las etiquetas de pescado y marisco

El 74% de los restaurantes, pescaderías y mercados donde se vende pescado y marisco, le están dando gato por liebre, o mejor dicho, tilapia por huachinango o cangrejo por langosta, reveló un estudio realizado por el Departamento de Salud Pública del Condado de Los Ángeles.

De mayo a agosto de este año, el Departamento de Salud Pública realizó inspecciones en 67 restaurantes de Los Ángeles, detectando que 46 de ellos estaban vendiendo un producto más barato (como la tilapia) a cambio del que anuncian en el menú (como el huachinango).

También se tomaron como muestra 36 mercados y pescaderías para inspecciones y descubrieron que 28 de ellos no contaban con etiquetas adecuadas, identificaban incorrectamente el producto y no se determinaba el lugar de origen del pescado.

El doctor Jonathan Fielding, director de Salud Pública del Condado, indicó que durante las inspecciones se tomaron muestras de ADN de los productos para determinar la especie de pescado que se estaba vendiendo y en el 74% de los casos resultó no ser el producto etiquetado o como se presentaba en el menú de los restaurantes.

A Felicia García se le dificulta distinguir entre un filete de tilapia, que es una variedad de la mojarra, y un corte de huachinango, lo que en inglés se conoce como “Red Snapper”.Y más cuando el producto está empaquetado y congelado, reconoce esta residente de Los Ángeles que ayer hacía sus compras en Vons, uno de los supermercados señalados por el Departamento de Salud Pública.

Otras de las tiendas señaladas en el reporte son: Ralphs, Bristol Farms, Vallarta Supermarket, Food 4 Less, Pavillions, Albertsons, Trader Joe’s, Seafood City, Galleria Market, 99 Ranch, Vien Dong, Central Fish Market, Superior, Assi, Hannam, Fisherman’s Outlet, HK2, Sea Ocean, Valley Supermarket y Santa Mónica Seafood.

“Yo no sé mucho de pescados, pero si aquí dice que es Red Snapper, pues debe ser, ¿que no?”, dijo la señora García.

El supervisor Michael Antonovich, quien ayer en conferencia de prensa junto al doctor Fielding anunció el resultad de las inspecciones, aclaró aún no se puede determinar la responsabilidad de las tiendas y restaurantes en las etiquetas de pescados y mariscos. La responsabilidad de esas violaciones, recalcaron, podría recaer en el operador, el distribuidor, el importador, o en todos ellos.

Héctor Martínez, de la Pescadería El Atacor, en Highland Park, explicó que es muy común que en las cocinas de los restaurantes lleven a cabo esas prácticas.

Por ejemplo, a la hora que ordenan un huachinango a la veracruzana, le podrían estar dando una variedad de mojarra, que en el mercado tiene un costo menor, pero que al cliente se la cobran como lo que pidió.

“Ahí si es fácil que te den gato por liebre, porque ya el filete cocinado, ya sea empanizado, condimentado o con una salsa encima, pues es muy difícil saber qué te dieron”, mencionó Martínez.

Jesús Amador, de la misma pescadería, indicó que la libra de tilapia la compra al mayoreo en $1 dólar mientras que el huachinango cuesta cuatro dólares.”La tilapia es más barata porque es de granja (piscícola), esa la mandan de China y de Taiwán, y el huachinango es de mar, tiene un mejor sabor”, comentó.

Las violaciones que se encontraron en las inspecciones van desde el etiquetado erróneo hasta la falta de facturación y no saber dónde fue pescado.

Entre las especies más comunes que suelen intercambiar para obtener más ganancias está la tilapia o cualquier otra variedad de mojarra por huachinango, escolar por atún blanco, swai por lenguado, pollock o carbonero por pargo, y langostino por langosta.

También se encontró que algunos productos se presentaban como frescos, pero eran congelados, además de que el peso era menos del que indicaban.

“Este es un asunto serio”, declaró Antonovich. “No sabemos si los restaurantes y mercados sabían, pero se han violado normas de salud y una vez que hemos encontrado el problema, vamos a continuar para resolverlo”.

El supervisor insistió que los supermercados y los restaurantes podrían también ser víctimas en este esquema de lo que podría llamarse “pescados piratas”.

El doctor Fielding indicó que muchas personas con alergias a ciertos pescados o mariscos podrían verse afectadas al creer que le están sirviendo lo que pidió o que compró lo que dice la etiqueta cuando en realidad se trata de otra cosa.

Un estudio de la Universidad de Wake Forest estableció que comer tilapia criada en granjas piscícolas podría ser riesgoso para quienes tienen problemas cardiacos, artritis, asma y alergias, ya que contiene una combinación de ácidos grasos.

Las inspecciones fueron realizadas por el Departamento de Salud Pública del Condado con apoyo de la Administración de Alimentos y Medicinas (FDA), la Administración Nacional Oceánica y Admosférica (NOAA) y el Departamento de Salud de California.

En esta nota

estafas pescados Precios
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain