Tijuana sufre problema de deportados

Constituyen el foco de criminalidad en la ciudad, afirma jefe policial

TIJUANA, México.— Para el secretario de seguridad pública municipal de Tijuana, Alberto Capella, los migrantes deportados que llegan a diario a esta ciudad fronteriza procedentes de Estados Unidos representan el principal problema social.

Según el jefe policíaco, en 2011 hubo 140 mil personas repatriadas hacia Tijuana, de las cuales 21 mil eran exconvictos.

Este número de deportados, consideró Capella, provocaría la misma crisis social en cualquier otra ciudad del mundo.

“Sabemos que son hermanos nuestros, que son mexicanos y que tienen los mismos derechos, pero ese es el principal problema social que tenemos en Tijuana”, recalcó.

Aseguró que el gobierno local está gastando millones de pesos para atender a los migrantes deportados que llegan a la ciudad y brindarles apoyo para que regresen a sus lugares de origen.

Sin embargo, indicó que un gran porcentaje de ellos se queda en la ciudad y muchos caen en la drogadicción, por lo que la canalización del Río Tijuana y la zona conocida como “El Bordo” se convierten en sus principales refugios.

En esas zonas, estimó, viven alrededor de 4 mil indigentes, la gran mayoría porque fueron expulsados de Estados Unidos, y son los vecinos quienes más padecen de robos en sus viviendas.

“Todas las colonias aledañas se encuentran en color rojo, que en términos delictivos significa que hay una alta incidencia de robos”, mencionó Capella.

Sin embargo, grupos defensores de los migrantes reprobaron que el jefe de la policía haga dichas declaraciones ya que parecería dar luz verde a sus agentes para que continúe el abuso en contra de esa población vulnerable.

José Ascencio Moreno Mena, presidente de la Coalicion Pro Defensa del Migrante, dijo que las autoridades no deberían caer en la tentación de criminalizar a los migrantes y hacer creer que llegan a la frontera para delinquir.

“Esa reacción de rechazo no es nada nuevo, pero no significa que los migrantes sean los portadores de los males que ocurren en Tijuana, seguramente Capella lo hace motivado por falsas percepciones que emiten funcionarios, empresarios y medios”, mencionó Moreno Mena.

Buena parte de quienes llegan a Tijuana procedentes de cárceles son porque cometieron faltas administrativas o delitos menores, señaló.

“Los migrantes son una población muy vulnerable que está sujeta a riesgos, como secuestros y extorsiones, y a la violación de sus derechos humanos con detenciones arbitrarias por parte de policías”, dijo Moreno Mena.

La Opinión ha expuesto en varias ocasiones los testimonios de deportados que quedan varados en la frontera en espera de cruzar de nuevo el cerco, pero en esa estadía han sido víctimas de abusos policíacos que los detienen por deambular en las calles y los asaltan.

Por ello Moreno Mena consideró que ese tipo de declaración de la autoridad parecería otorgar permiso a los agentes para abusar de los migrantes, además de crear xenofobia.

Lo mismo consideró Enrique Morones, director de Ángeles de la Frontera, al señalar que no se vale echarle la culpa a quienes por necesidad tienen que vivir en las calles.

“Respeto el trabajo de Capella, pero no estoy de acuerdo con lo que dice”, comentó.

“El problema social es que México no les da oportunidad a quienes tuvieron que salir del país forzados por la necesidad económica y ahora que los regresan tampoco les está dando la oportunidad”

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mayas
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