Arias podría unirse a 3 que esperan morir en Arizona

Si la hispana es sentenciada a la pena capital, se uniría a otras tres mujeres que aguardan su ejecución en cárceles del estado

Jodi Arias fue declarada culpable de asesinato en primer grado el pasado 8 de mayo.

Jodi Arias fue declarada culpable de asesinato en primer grado el pasado 8 de mayo. Crédito: AP

Phoenix – La hispana Jodi Arias, declarada culpable del asesinato de su novio en 2008, podría unirse, si un jurado así lo determina, a otras tres mujeres que aguardan la pena de muerte en Arizona.

Un jurado compuesto por ocho hombres y cuatro mujeres determinará en la Corte Superior del condado de Maricopa durante los próximos días si Arias recibe la pena capital por el sangriento asesinato de su novio, Travis Alexander.

Después de cuatro meses de mediáticos testimonios, Arias, de 32 años, fue declarada culpable de asesinato en primer grado el pasado 8 de mayo.

El mismo jurado concluyó la semana pasada que existió “crueldad extrema” en el asesinato de Alexander, quien el 9 de junio de 2008 recibió un tiro en la cara, su cuello fue cortado de lado a lado y fue apuñalado 27 veces en su casa.

Tras la conclusión del jurado, Arias, de ascendencia mexicana por parte de padre, podría ser sentenciada a la pena máxima y unirse a la lista de las mujeres sentenciadas a muerte en Arizona.

En esta lista se encuentra Debra Milke, quien fue declarada culpable de la muerte de su hijo Christopher Conan Mike en 1990.

El 2 de diciembre de 1989, Milke y dos cómplices dijeron a Christopher, de cuatro años, que irían a conocer a Santa Claus en un centro comercial, pero lo llevaron a una zona apartada en el desierto, le dispararon en la cabeza y dejaron su cuerpo en el lugar.

Durante el juicio, la fiscalía aseguró que el niño se había convertido en una carga pesada para la acusada, por lo que lo quería muerto.

Milke, actualmente de 49 años, fue la primera mujer en ser sentenciada a la pena de muerte en Arizona desde 1932.

También recibió la pena máxima Wendi Andriano, de 42 años, que, de acuerdo con la fiscalía, mató a su esposo, enfermo de un cáncer terminal, porque estaba cansada de cuidarle.

Debido a que el veneno no funcionaba tan rápido como ella quería, lo apuñaló y lo golpeó con un taburete hasta que murió. La mujer fue sentenciada en 2004 por asesinato premeditado.

El fiscal en este caso fue Juan Martínez, el mismo que podría llevar el de Arias en las deliberaciones por la pena capital.

El caso más reciente de una mujer sentenciada a muerte en el estado es de febrero de 2011, cuando Shawna Forde, de 45 años, fue sentenciada por la muerte del hispano Raúl Flores Jr y su hija Brisenia Flores, de 9 años, en la población fronteriza de Arivaca.

Forde, miembro activo del grupo paramilitar Minuteman, se hizo pasar por agente del orden para entrar en el hogar de Flores, el 30 de mayo de 2009.

Según documentos de la corte, Forde, acompañada de otras dos personas, entró a la vivienda en busca de drogas y dinero, que esperaba utilizar para financiar las actividades del grupo paramilitar que vigila la frontera de Arizona con México.

Cuando los invasores no encontraron droga, se llevaron joyas, pero primero mataron al padre y a la hija. Gina González, esposa de Flores y madre de Brisenia fue la única sobreviviente y testigo principal durante el juicio.

“La Corte Suprema de Estados Unidos decidió que es el jurado quien debe sentenciar a la pena de muerte a una persona y no el juez”, explicó a Efe Antonio Bustamante, penalista en Arizona.

El abogado agregó que ahora que el jurado determinó que hay razón suficiente para considerar la pena capital, la decisión debe ser unánime.

También aclaró que si el jurado no puede llegar a una decisión unánime, será el juez quien pueda sentenciar a Arias a pasar el resto de su vida en prisión o vida en prisión con posibilidad de salir con libertad provisional después de 25 años.

Hasta el momento, no hay ninguna fecha establecida para ejecutar a las mujeres que actualmente se encuentran sentenciadas a la pena de muerte, quienes siguen apelando sus casos.

La última mujer que fue ejecutada en Arizona fue Eva Dugan, en 1930.

Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain