Ex administrador de Bell enfrenta 10 a 12 años de prisión

Robert Rizzo, ex administrador de la ciudad de Bell, acusado de corrupción y mal uso de fondos públicos, declaró hoy que no disputará los 69 cargos de corrupción pública en su contra.

Rizzo, quien estaba recibiendo casi $800,000 al año en salario antes de su renuncia en julio de 2010, fue acusado de una serie de esquemas que defraudaron a la ciudad de Bell de $5 millones de dólares, incluyendo escribir sus propios contratos de trabajo, que nunca habían sido aprobados por el ayuntamiento.

Al no oponerse a los cargos, no se llevará a cabo el jucio de corrupción en su contra, programado para comenzar el próximo lunes, 9 de octubre.

La juez Kathleen Kennedy dijo que castigará a Rizzo con un mínimo de 10 años y máximo de 12 de prisión cuando regrese a la corte el 12 de marzo del 2014 para la sentencia.

Esto haría que el ex funcionario se convierta en el servidor público sentenciado al tiempo más largo en prisión en la historia por cargos de corrupción pública desde que se se estableció en el 2000 la división de integridad pública (PID), que investiga este tipo de casos.

“Aunque estábamos preparados para ir a juicio y nos sentíamos confiados de poder condenar a Rizzo, estamos complacidos de que haya elegido admitir su culpabilidad y su responsabilidad por el dañó irreparable que causó a la gente de Bell”, dijo la fiscal de Distrito Jackie Lacey en una declaración escrita.

“Rizzo fue, es, y siempre sera culpable”, expresó a La Opinión el concejal y ex alcalde de Bell, Ali Saleh.

“Esto es solo parte del principio de la justicia que esperamos se haga con el resto de las personas involucradas en el escándalo, porque ellas son tan culpables como Rizzo”, agregó.

Cinco ex concejales ya han sido condenados por cargos de corrupción. El juicio contra Angela Spaccia, vice administradora de la ciudad bajo Rizzo, comienza el lunes.

“El daño financiero que Rizzo y esa gente causó a nuestra comunidad se quedará por años en nuestra ciudad”, sostuvo Saleh.

Alma Hernández, residente de Bell por más de 23 años, confesó sentirse feliz con la noticia.

“El escándalo nos ha afectado a todos, pero más a los propietarios de casa aquí en Bell, porque ahora pagamos el robo con nuestros impuestos”, compartió.

Saber que Rizzo está encaminado a pisar la cárcel por su crimen es el resultado de la lucha de mucha gente, que estaban “sedientos de justicia”, dijo Hernández.

Rizzo aún enfrenta cargos federales y una demanda civil interpuesta por el fiscal general del estado.