Familiares de Raymond Santana sufrieron el rechazo
El hispano fue condenado junto a otros cuatro por un crimen que no cometió, en el caso conocido como "Central Park 5"

Raymond Santana, padre, junto a su hija Jo-Ann. Crédito: Mariela Lombard / EDLP
NUEVA YORK – El papá y la hermana mayor de Raymond Santana, hijo, relataron que, además de la injusticia de verlo en la cárcel por un crimen que no cometió, tuvieron que enfrentar el rechazo de sus vecinos en East Harlem, de amigos, y hasta de miembros de su propia familia.
“Todavía hoy estoy batallando con mi hermano por este caso”, explicó Raymond Santana, padre, de origen puertorriqueño. “Él me quiso sacar del apartamento, y por eso tenemos un caso en corte”.
Según explicó, su hermano tenía el arrendamiento del apartamento, pero quiso sacarle cuando los periodistas montaron guardia delante del edificio. También aseguró que todavía hay parientes con los que no se habla porque consideran que su hijo es culpable.
Santana padre, ahora retirado, trabajaba como auxiliar de enfermería cuando su hijo fue a prisión en 1990. Según contó, sus compañeros rechazaban compartir la misma mesa en la hora del almuerzo. “Fue un infierno”, expresó, “hasta sufrí un infarto”. Él es hoy el único padre de los cinco acusados que sigue con vida.
La hermana, Jo-Ann Santana, tenía apenas 18 años cuando Raymond fue encarcelado.
“Mi papá estaba enfermo, mi hermano preso, y mi mamá fallece de cáncer poco después”, lamentó. Llena de lágrimas, recordó que el último deseo de su mama antes de morir fue ver a su hijo.
“Le agradecemos a las personas que creyeron en ellos desde un principio”, dijo, sobre los llamados “Central Park 5”. “Sabíamos que la verdad llegaría algún día, y finalmente llegó 25 años después”.