Benzema da luz a un Real Madrid opaco

El Liverpool con suplentes complica a los merengues en el Santiago Bernabéu

Karin Benzema logró el gol del triunfo ante Liverpool.

Karin Benzema logró el gol del triunfo ante Liverpool. Crédito: <copyrite>EFE</copyrite><person>< / person>

Madrid

Un gol de Karim Benzema, que prolongó su excelencia, bastó para sellar la clasificación para los octavos de final de la Liga de Campeones del Real Madrid, desprovisto, sin embargo, de la brillantez de la que ha alardeado en los últimos compromisos.

La duodécima victoria consecutiva del conjunto de Carlo Ancelotti, cuarta en Europa, fue sufrida. Más de lo esperado. Ante un Liverpool menor. Cargado de suplentes. No hubo récord de Cristiano Ronaldo. Obsesivo por el gol para dar caza a Raúl González, ofreció un partido gris y sigue a orillas del registro.

La vuelta a la convocatoria del galés Gareth Bale no alteró en exceso el once de Carlo Ancelotti, que recurrió al clásico en los últimos encuentros con la presencia de Raphael Varane por Pepe y de Arbeloa en lugar del lesionado Dani Carvajal.

Brendan Rodgers, sin embargo, agitó inesperadamente la puesta en escena de su equipo. Con más lustre en el banquillo de reservas que sobre el césped. Habituales como Steven Gerrard, Coutinho, Glen Johnson, Jordan Henderson, Raheem Sterling o Mario Balotelli quedaron en la banda con el chándal puesto.

La ausencia de estos generó alguna que otra sospecha. La sensación de entregar un partido en una competición donde casi no tienen margen de error. Rodgers debió pensar que la del Santiago Bernabeu no es su batalla.

El Liverpool no disparó a Iker Casillas hasta el minuto 55. Con un tiro lejano y centrado. El capitán cumplió su partido 144 sin sobresaltos.

Resistió veintisiete minutos el Liverpool. Simon Mignolet ya había parado dos tiros de gol, de James Rodríguez y Cristiano Ronaldo, consecuencia de una salida en tromba del cuadro de Ancelotti. Pendiente del récord anotador el portugués no cuajó una gran noche.

Mandó y tuvo el balón de forma abrumadora pero sin peligro desde entonces, hasta que una acción gestada por Isco y continuada por Marcelo fue aprovechada por Benzema, que abrió el marcador.

El equipo inglés llegó vivo al tramo final y Rodgers pensó en Gerrard y en Sterling, a los que sacó al césped de una tacada con veinte minutos por delante por jugar.

Bale pudo sentenciar con un remate al palo tras un centro de Marcelo, el único capaz de alterar la velocidad en ataque del equipo blanco.

El empuje final del Liverpool, con Philippe Coutinho también ya en el campo, arrinconó al Real Madrid, incapaz de cerrar antes el duelo y a expensas de cualquier contraataque como solución para intentar no perder el equilibrio

eldiariony.com

Suscribite al boletín de Deportes

Recibe gratis el boletín de deportes que un verdadero fan no se puede perder

Este sitio está protegido por reCAPTCHA y Google Política de privacidad y Se aplican las Condiciones de servicio.

¡Muchas gracias!

Más sobre este tema
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain