La lucha contra el costo de medicinas recetadas
La gran mayoría de los estadounidenses están en contra del comportamiento irresponsable de las empresas farmacéuticas por cobrar en forma excesiva por las medicinas recetadas.
En una encuesta realizada por la Kaiser Family Foundation, más de un 70% de las respuestas indicaron que los precios de los medicamentos recetados eran muy altos.
En DC 37, también hemos sufridos la pesada carga de esos altos precios.
Desde hace muchos años, nuestro plan de seguridad y salud ha tenido que esforzarse parar mantener el popular beneficio de medicinas recetadas debido a los aumentos desmedidos de los medicamentos.
Pero esos altos precios también impactan a las familias latinas en nuestras comunidades, muchas de ellas quienes tienen dificultades para poder cumplir con sus obligaciones económicas cotidianas.
Hace poco una compañía farmacéutica anunció un aumento del 5,000% (de $13.50 a $750) para una medicina necesitada para tratar a las personas con SIDA o con ciertos cánceres afectadas por una infección parasitaría.
Esos aumentos excesivos son injustificados, especialmente cuando se tiene en cuenta que, según la Organización Mundial de la Salud, la industria farmacéutica obtiene ganancias de $300,000 millones por año.
Por lo general, los precios de las medicinas recetadas en nuestro país son más caro que en otros países. Según datos de la Federación Internacional de Planes de Salud, típicamente pagamos entre dos y seis veces más que el resto del mundo por los medicamentos de las marcas más conocidas.
Sin embargo, la industria farmacéutica insisten en que los altos precios son justificados, debido a los elevados costos de la investigación y el desarrollo de nuevas drogas, aunque nueve de las diez empresas más grande, gastan más en el marketing que en la investigación y el desarrollo de sus productos.
A diferencias de otros países, nuestro gobierno no controla los precios de las medicinas. De hecho, el gobierno tiene prohibido negociar los precios de las medicinas que corresponden a la parte de Medicare, que incluye los medicamentos recetados, y que se aprobó durante el gobierno del presidente George W. Bush.
En su próxima visita a la farmacia, pregúntele al farmacéutico cuánto costaría cada medicamento recetado si usted no tuviera seguro médico para cubrir dichas medicinas como tantos en nuestras comunidades latinas.
Eso le dará una idea clara de las enormes ganancias de esa industria y porque es necesario trabajar con nuestros oficiales electos y grupos comunitarios para controlar los precios de dichas medicinas.
-Henry Garrido es el director ejecutivo de DC37.
