Senador Cruz presenta medida para frenar reasentamiento de refugiados en EEUU
Líderes religiosos prometen “resistencia” ante ola xenofóbica
WASHINGTON.- El senador y precandidato presidencial republicano, Ted Cruz, presentó este martes una medida contra el reasentamiento de refugiados, provocando un choque con líderes demócratas y religiosos que atacaron la “política del miedo” de los conservadores.
Acompañado del gobernador de Texas, Greg Abbott, Cruz explicó que su proyecto de ley, el “Acta para la Seguridad Estatal sobre Refugiados” modificará una ley de inmigración federal de 1965 de tal manera que los gobiernos estatales puedan frenar la llegada de refugiados, a menos que tengan garantías de que éstos no representan un riesgo de seguridad.
Según Cruz, la primera responsabilidad de los gobiernos estatales es velar por la seguridad ciudadana y que la estrategia de EEUU para vencer al “terrorismo islámico” debe garantizar la derrota de esos grupos extremistas.
En la actualidad, Texas lidera una treintena de estados opuestos al reasentamiento de refugiados, luego de que la Administración Obama decidiera aceptar a unos 10,000 refugiados sirios en los próximos doce meses.
En concreto, la medida exige que el gobierno federal notifique al estado, con al menos 21 días de antelación, sobre el reasentamiento de refugiados, y permite que el estado en cuestión los rechace si no obtiene garantías del gobierno federal de que no son una amenaza pública.
Otros republicanos también insisten en incluir el asunto de los refugiados en el presupuesto federal, cuando quedan tres días para que el gobierno agote sus fondos operacionales.
La cláusula en cuestión, que sigue siendo elaborada, restringiría aún más el proceso de admisión de refugiados en EEUU, y es similar a una que aprobó por separado la Cámara de Representantes el mes pasado.
No está claro que los estados puedan frenar a los refugiados una vez que éstos reúnen todos los requisitos exigidos por EEUU y entran al país.
Activistas prometen resistencia
En paralelo, y acompañados por varios líderes demócratas del Senado, representantes de una influyente coalición religiosa prometieron mantener la resistencia a lo que consideran como una ola xenófoba en algunos círculos conservadores.
Su mensaje durante una hacinada rueda de prensa en el Capitolio es que “ya basta” de una retórica incendiaria hacia los refugiados y sus familias.
El consenso de los líderes religiosos, entre cristianos, judíos y musulmanes, es que el gobierno de EEUU no puede imponer una “prueba” de lealtad religiosa como requisito para entrar al país.
Para los líderes religiosos, la crisis de refugiados en el mundo lo que está poniendo a prueba es la tolerancia y tradición de bienvenida de los inmigrantes que ha tenido EEUU a través de su historia.
El cardenal Theodore McCarrick, de la arquidiócesis de Washington, dijo que, contrario a lo que alegan los críticos, EEUU tiene el programa de refugiados “más riguroso del mundo” y no hay razón para frenarlo, a la vez que lamentó los políticos estén promoviendo una cultura del miedo.
El debate sobre la debida respuesta de EEUU a la crisis global de refugiados subió de tono ante la propuesta del magnate empresarial y precandidato presidencial republicano, Donald Trump, de frenar la llegada de musulmanes a EEUU. Su plan de inmediato causó la repulsa de la Casa Blanca, la comunidad musulmana y líderes religiosos en todo el país.
En ese sentido, el senador demócrata de Vermont, Patrick Leahy, aconsejó a Trump a que “lea la Constitución” para que se entere de que su plan contraviene los valores fundacionales de EEUU.