Show de Reyes y Flores en victoria de los Mets

Dos jonrones del venezolano y dos dobles del quisqueyano firman la victoria de los metropolitanos por 4-2 sobre los Marlins

José Reyes emocionó a Citi Field.

José Reyes emocionó a Citi Field. Crédito: Getty Images

En un juego que de nuevo levantaba la expectativa por medir la reacción del público con la presencia del controvertido José Reyes, los Mets echaron mano de sus armas cortas para ganar 4-2 a los Marlins y dominar la serie de tres juegos en su fortín del Citi Field.

La tarde candente que marcaba 95 grados se la robó Wilmer Flores, quien con dos cuadrangulares dijo presente y envió un mensaje de su dimensión como pelotero. La respuesta de José Reyes con dos dobles acabó de encender una jornada en la que Giancarlo Stanton bateó dos cuadrangulares para los Marlins.

Sorprendió Terry Collins al dar descanso a Asdrúbal Cabrera para poner a Reyes en el campocorto y a Flores en tercera base. Era un voto de confianza y una apuesta dura que le dio resultado.

Anunciaron a Reyes y – más aplausos que silbidos- vino a buscar su primer imparable en la nueva etapa con Mets ante el zurdo Justin Nicolino. Elevado a tercera y fuera.

Los héroes fueron pasando y el “utility man” volvió a decir presente. En el primer pitcheo que vio, una recta de cuatro costuras de 91 millas, Wilmer Flores la sonó sabroso por arriba del center field para poner 1-0 en la pizarra.

En la tercera llegó la primera intentona por quemarle el rancho a Nicolino. Primero perdió a Rivera y cuando deGrom buscaba tocar con infield hit, (por out de selección) sacaron a Rivera en segunda y deGrom llegó a primera.

Vino entonces Reyes con su primer hit en la nueva era con Mets. Y bateó doble al left field para poner hombres en segunda y tercera con un out y esperar a Granderson.

Dicho y hecho. Batazo de Granderson al rightfield y dos que pasaron por home para ponerlo 3-0.

Giancarlo Stanton que había disparado dos jonrones en la noche anterior volvió a meterle el miedo en los huesos a los fans de Queens y dejó para los coleccionistas una pelota en el segundo piso del Citi Field y puso el juego 3-1.

Llegó la respuesta. Una buena tarde para un héroe anónimo.

Vino Flores y con la cuenta en 3-1 la vio, le gustó, le pegó y la envió arriba de la cerca para poner su segundo cuadrangular del día y dejarlo transitoriamente 4-1, mientras le enviaba un mensaje rotundo a Terry Collins en medio de un respaldo abrumador de la tribuna.

Tenía deGrom en su brazo 75 lanzamientos cuando Gillespie que bateaba por el lanzador Nicolino, le dio doble. Tres pitcheos después, con 78, Dietrich le dio imparabale y sin outs los Marlins se metían en la ofensiva con hombres en primera y segunda.

Pudo sacar a Realmuto y con la idea de evitar a Stanton con hombres en base buscaban la doble matanza.

A deGromn se le hizo el milagro cuando enfrentó a Yelich y su línea por segunda fue a zona de Walker quien hizo el out y lanzó a primera para el doble play.

Por los Marlins ya lanzaba Mike Dunn y Reyes lo saludó con un doble larguísimo a left field. Luego Granderson pegó imparable y el escenario ahora eran hombres en las esquinas, sin outs, para esperar a Céspedes.

Dunn lo trabajo con la slider y luego -recta contra poder- lo ponchó con 94 millas por hora para colgar el primer out.

Walker negoció boleto gratis y llegó Flores, con las bases llenas y un out. Con la cuenta en 3-1 conectó por tercera para doble play y mató la entrada.

Enfrentaba deGrom con 92 lanzamientos a Osuna y lo sacó con elevado, pero el temido Stanton volvió a verla buena y bateó otro cuadrangular para ponerlo 4-2 y dejar en los libros el bombazo número 200 en su carrera.

Collins trajo a Addison Reed en lugar de deGrom para la séptima entrada y sacó en filita a Realmuto, Yelich y Ozuna sin permitir libertades.

Después del cuarto intento fallido de Céspedes que se quedó sin hit, vino Walker que corrió la misma suerte ante Kyle Barraclough. Con dos outs vino el muchacho de la casa, Wilmer Flores, que sin tiempo para más hazañas la vio pasar, se la cantaron y se fue por la vía del ponche.

Con ocho completas y los Mets ganando 4-2 Jeurys Familia llegó a la lomita donde ya lo esperaba Giancarlo Stanton.

Lo primero fue hacerle swing a una recta de 94 mph para strike. Mantuvieron su duelo y en el octavo pitcheo de Familia, el rudo toletero la vio pasar y se fue out.

Johnson fue el segundo hombre y le bateó imparable y cuando Ichiro Suzuki tomo su único turno al bate podía empatar el juego con un swing grande, pero no hubo tal. Fue doble play y los Mets ganaron 4-2.

El juego lo ganó deGrom(5-4) y lo perdió Nicolino (2-5) mientras Jeurys Familia llegó a 30 salvamentos.

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