Milagro de navidad para trabajador de comida rápida

Hay personas que dan más de lo que le piden

Los grandes trabajadores son recompensados.

Es la historia de Jakeem Tyler, de 18 años y cajero de un Chick-fil-A en Indianapolis. El pasado 8 de diciembre Cameron Nelson lo vio trabajar mientras usaba un cuello ortopédico y un cabestrillo en el brazo.

El cliente preguntó al joven qué le pasó y se enteró que sufrió un accidente de auto. La razón por la que no estaba incapacitado es que necesitaba seguir trabajando para mantenerse y ayudar a dar de comer a los desamparados durantes las fiestas.

Sorprendido por la historia, Nelson abrió un campaña en GoFundMe.com para ayudar al cajero. El objetivo era conseguir $2,500 pero en pocos minutos se pudo conseguir más de $42,000.

El joven ha sido entrevistado en varios medios a los que cuenta que su pasión por el trabajo y el servicio lo aprendió de sus padres.

El dinero recogido irá a los desamparados.

En esta nota

Buenas noticias Indiana
Contenido Patrocinado