Cinco razones por las que Peña y AMLO quieren ganar en el Estado de México

Comienzan las descalificaciones y "guerra política" para atraer al electorado en las próxima elecciones en México

MÉXICO – Un video filtrado a la prensa mexicana donde una candidata del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) presuntamente recibió alrededor de 20,000 dólares para la campaña política de su líder y fundador del partido Andrés Manuel López Obrador es el último escándalo de una campaña por gobernar el Estado de México que pelean por cinco razones el político de izquierda y el presidente Enrique Peña con sus respectivos candidatos Alfredo del Mazo y Delfina Gómez.

Video: Candidata de Morena recibe dinero para López Obrador y desata polémica

1. Tiene el mayor número de votantes

Con un padrón de 11 millones de electores, el Estado de México representa uno de cada cuatro sufragios de la lista nominal del país que suma en total 45.3 millones.

Por tanto, cada voto emitido el próximo 4 de junio simboliza la tendencia que seguirán las elecciones presidenciales de 2018 a la que AMLO aspira por tercera ocasión con altas posibilidades de victoria ante los múltiples escándalos de corrupción que ronda la administración de Peña.

2. Es un estado rico con gente pobre

Aunque la entidad no aparece entre las primeras 10 con mayor ingreso percapita, sí alberga una industria boyante y a algunas de las zonas con mayor plusvalía en el país, donde  el metro cuadrado para vivienda llega a tener valor similar a aquel donde  viven millonarios de Londres o Nueva York.

A la vez el Estado de México tiene uno de los niveles de pobreza urbana más alta  que puede manipularse fácilmente para compra de votos debido a las necesidades más básicas.

“De acuerdo con la previsión de la pobreza 2008, el 43.7% de su población es pobre. Esto quiere decir que tiene al menos una carencia social, educativa, de salud, seguridad social, vivienda o alimentación y además tiene un ingreso insuficiente”, puntualizó Gonzalo Hernández, secretario Ejecutivo del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social.

3. Por “los moches”

En los últimos años ha permeado  en la  política la cultura del “moche”, una práctica que consiste en la obligación no escrita que tienen los funcionarios que se hacen de un puesto de poder público de dar a los lideres una parte de su salario o de los “negocios” que logren gracias a sus posiciones en el gobierno.

Este dinero cobra mayor importancia en tiempos de campaña: en su momento se llegó a acusar al ex gobernador Javier Duarte de desviar recursos para la campaña de Peña y al mismo López Obrador de exigir dinero para su campaña a sus subordinados cuando fue jefe de gobierno de la CDMX.

4. Por asuntos de linaje

El candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alfredo del Mazo Meza es nieto e hijo de dos ex gobernadores del Estado de México y fundadores del famoso Grupo Atlacomulco, uno de los más fuertes dentro del partido que a su vez llevó a Peña al poder.

Del Mazo garantizaría la continuidad del grupo como una de las fuerzas que manda en el país.

5. El último bastión de PRI

El Estado de México es una de las últimas entidades donde no ha dejado de gobernar y conservar el poder es una garantía para evitar una persecución política cómo ha ocurrido en Veracruz, Chihuahua, Sonora o Quintana Roo.

“Si AMLO gana y cumple sus promesas de perseguir a los corruptos podríamos ver a muchos priistas encarcelados porque la justicia  en México opera por cacería de brujas no por sí misma”, observó Alejandro Reyes, analista Politico de la Universidad Autónoma Metropolitana.

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