Los latinos son quienes más trabajos eventuales tienen
La mayor parte trabaja menos de 35 horas semanalmente
La tasa de desempleo de los latinos fluctúa más que la de la población en general de un mes a otro. Una de las razones es que hay mucha temporalidad en el empleo y en este sentido también hay mucha eventualidad o contingencia.
De hecho, los latinos son quienes más se emplean en labores eventuales, es decir, trabajos temporales que no tienen posibilidad de mantenerse por la naturaleza del propio trabajo.
Son datos de la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS en sus siglas en inglés) que muestran como trabajadores asiáticos y más aún los latinos son los que más trabajan en tareas sin continuidad, como vender árboles de Navidad o preparar un determinado evento que es único (una boda). El BLS no considera eventuales a los trabajadores que no esperan seguir trabajando por razones personales como estar cerca de la jubilación o volver a los estudios.
Unos seis millones de personas eran eventuales, según las últimas cifras de mayo de 2017 y eso deja claro que la tendencia es al alza porque en 2005, cuando se estudió este particular segmento del mercado laboral un 4.1% de los trabajadores tenía este tipo de empleo. En 1995 el 4.9% estaba en estas circunstancias laborales.
El problema de este tipo de relación laboral es que normalmente los empleados están, además, contratados a tiempo parcial, es decir menos de 35 horas por semana por lo que ganan menos que el resto en una posición similar. Además no suelen tener seguro médico ni acceso a un plan de jubilación por parte del empleador. Es decir, están en una situación mas vulnerable que el resto.
La contingencia se encuentra sobre todo en los sectores de educación y servicios de salud pero no solo y afecta a personas de distintos niveles académicos. Hay consultores que han pasado por la universidad y trabajan de forma contingente (el lanzamiento de un producto al mercado) y cuidadores de ancianos que en muchas ocasiones no tienen más estudios que los de secundaria.
La mayoría de ellos, según ha detectado el BLS, preferiría un trabajo permanente aunque un tercio está contento con el tipo de arreglo laboral que tienen dada la flexibilidad que proporciona. Algunos, en ciertos campos puede mantener un estilo de vida de clase media, sin necesidad de mantener un empleo constante a tiempo completo. El resto no expresó preferencia.