Cambio propuesto sobre ‘carga pública’ es un ataque contra inmigrantes

En términos más generales, la regla propuesta por el gobierno de Trump ahondará la existente crisis de salud pública

Un cliente entra a una tienda del sector Skid Row del centro de Los  Ángeles que acepta estampillas de comida (EBT).

Un cliente entra a una tienda del sector Skid Row del centro de Los Ángeles que acepta estampillas de comida (EBT). Crédito: J. Emilio Flores / La Opinión

Los cambios recientemente propuestos a la regla de la carga pública por el gobierno de Trump-Pence es un ataque a las comunidades de inmigrantes y como educadora comunitaria de salud, ya estoy viendo el impacto en la Ciudad de Nueva York.

Superviso el programa Promotores de Salud de Planned Parenthood of New York City. Los Promotores de Salud (Promotores) son educadores y partidarios capacitados que tienen como objetivo aumentar el acceso a los servicios de salud sexual y reproductiva para las personas Latinxs, predominantemente de habla española, en la ciudad de Nueva York. Logran integrar información sobre temas de salud y el sistema médico a la cultura, al idioma y al sistema de valores de sus comunidades. Los promotores son líderes confiables en sus comunidades y ofrecen información y talleres educativos culturalmente competentes sobre una variedad de temas de salud.

Este verano, mientras brindábamos servicios de interpretación médica en nuestra Unidad Médica Móvil, nuestro personal vio a una paciente que dudaba en ser remitida al sistema de hospitales públicos para seguimiento para cáncer debido a lo que había visto en las noticias sobre la propuesta de cambios a la regla de carga pública de la administración de Trump-Pence.

La paciente está indocumentada y temía que si accedía cualquier servicio público, incluyendo la atención médica básica, comprometería su elegibilidad para solicitar una visa o tarjeta verde. Sabemos que las probabilidades para los pacientes son mejores cuando se detecta el cáncer lo más pronto posible. Sin embargo, el temor de convertirse en una carga pública se convirtió en otro obstáculo que ella tiene que navegar. Y ella no está sola. Muchos miembros de las comunidades inmigrantes ya han expresado preocupaciones similares.

Los cambios propuestos a la regla de la carga pública son otro ataque de la administración de Trump-Pence a las comunidades inmigrantes en todo el país. Si se promulgan, las reglas podrían dañar a más de 475,000 inmigrantes en la ciudad de Nueva York. De ellos, más de 75,000 inmigrantes neoyorquinos se verían obligados a decidir entre acceder beneficios públicos tales como Medicaid u obtener su tarjeta verde. Incluso, residentes permanentes o ciudadanos que viven en familias inmigrantes pueden tener miedo a acceder a los servicios y beneficios porque temen comprometer el estatus de inmigración de un miembro de su familia.

Las reglas propuestas amplían enormemente que beneficios gubernamentales que se consideran al determinar quién es una carga pública. Los cambios propuestos incluirían Medicaid, el Programa de Asistencia de Nutrición Suplementaria (SNAP), vales para asistencia para vivienda pública y de vivienda de la Sección 8 y subsidios para recetas médicas para personas de bajos ingresos que se benefician de Medicare. Estos cambios obligarían a miles de inmigrantes neoyorquinos, incluyendo a los residentes permanentes legales que no están sujetos a la prueba de carga pública, a retirarse de los beneficios públicos debido al temor y la información errónea de quién se ve afectado por la regla y cómo les afecta a ellos o a sus familias.

Como proveedor de atención médica de confianza, PPNYC ve de primera mano los desafíos y las barreras con que se enfrentan los inmigrantes de Nueva York al acceder atención a la salud. Los neoyorquinos inmigrantes representan el 37% de la población de nuestra ciudad, pero tienen menos probabilidades que otros neoyorquinos de estar asegurados y recibir atención rutina preventiva. La promulgación de los cambios propuestos a la regla de carga pública restringiría aún más las opciones que tienen las personas cuando intentan acceder atención a la salud y recursos para sus familias.

En términos más generales, la regla propuesta sobre la carga pública afectaría la existente crisis de salud pública y agravaría problemas como la seguridad alimentaria, la falta de viviendas asequibles y pondría en peligro el logro educativo. Además, los personas podrían evitar la atención necesaria, como vacunas para enfermedades contagiosas, lo que puede aumentar las posibilidades de un brote.

Si bien estos ataques federales continuarán, es importante que la ciudad de Nueva York se asegure de que todas las personas tengan acceso a la mejor atención médica para ellos y sus familias. La atención a la salud es un derecho humano y debemos crear comunidades donde todas las personas puedan gozar de buena salud y sentirse empoderadas.

No se quede callado(a) hoy contra este ataque a nuestras comunidades de inmigrantes. Envíe un comentario al Department of Homeland Security antes del 10 de diciembre.

(Larissa Vasquez es la Gerente de Programas para Adultos en Educación en Planned Parenthood of New York City)

En esta nota

carga pública
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain