Llorar es beneficioso para la salud

De tristeza, de frustración, de desilusión. Motivos pueden sobrar para tener ganas de llorar, sin embargo todavía hay quienes reprimen esos deseos sin pensar que el llanto emocional tiene efectos positivos en el organismo.

En momentos en que las cosas no han salido como se quieren o se presentan imprevistos desesperantes en medio de la tranquilidad, las personas tienen reacciones químicas en su cuerpo a través de las lágrimas que lo último que deberían hacer es contener esas ganas de llorar.

Dejar correr esas lágrimas es bueno para el cuerpo ya que en ese momento de dolor se cumple una función vital en el desarrollo humano. William H. Frey II, bioquímico de la Universidad de Minnesota, propuso que la gente se siente mejor después de llorar debido a la eliminación de hormonas asociadas con el estrés, en particular la hormona adrenocorticotropa.

Al derramar lágrimas en medio de la frustración, como suele ocurrir en la fase adulta de una persona, se le permite al cuerpo disminuir los niveles de angustia para que este logre calmarse de forma natural. Pero también se cumplen funciones básicas.

Con el llanto se limpia el lagrimal, se consigue una adecuada hidratación del ojo y se liberan las hormonas del bienestar, eliminando adrenalina, noradrenalina y oxitocina, que provocan los mismos efectos que algunos analgésicos.

Incluso se llega a comparar con los beneficios que trae la risa en el cuerpo. Cuando el cuerpo manifiesta estas emociones, se tienen beneficios con la presión sanguínea, la aceleración y detención de la respiración, el enrojecimiento y la palidez del rostro e incluso el tono muscular. Ambas permiten descargar tensiones y poseen una función reguladora que crea circunstancias ventajosas para el organismo.