Gimnasios de la Gran Manzana reabren con ejercicio complicado: garantizar el distanciamiento social

Todavía muchos de estos centros de actividad física se las ingenian para adecuar sus espacios ante el desafío de recibir a sus clientes en tiempos de COVID-19

El control de la temperatura corporal y la esterilización constante de los equipos forman parte de la nueva rutina.

El control de la temperatura corporal y la esterilización constante de los equipos forman parte de la nueva rutina. Crédito: Fernando Martínez | Impremedia

Luego de casi seis meses cerrados, centenares de gimnasios de la Gran Manzana reabrirán nuevamente sus operaciones este miércoles, con el gran desafío de tener una nueva ‘musculatura’ para cumplir con las medidas impuestas por las autoridades de Salud relativas a contener la propagación del COVID-19.

En general, las normas que deberán practicar de manera rigurosa estos establecimientos, unos de los más demandados por los neoyorquinos, consiste en limitar la capacidad de personas en un 33% de cada espacio, el uso obligatorio de máscaras, esterilización de equipos, controles de temperatura y distanciamiento social.

Pero en la práctica, toda esta rutina de ‘ejercicios preventivos’ resulta muy complicada.

Este martes todavía muchas de las grandes cadenas de estos centros de actividad física trataban de adecuar sus espacios y entrenaban a su personal, ante el reto que se inicia con una clientela en tiempos de COVID-19.

“Hemos recibido mucha información de cómo debemos trabajar ahora. Todos tenemos que estar muy enfocados en la limpieza y en vigilar el distanciamiento social. Lo que se espera es cómo van a actuar los clientes con la nueva normalidad”, comentó el empleado de una de las grandes cadenas de gimnasios de la ciudad, con sede en los cinco condados.

Entre los trabajadores de los gimnasios genera mucha expectativa cómo se comportarán personas obligadas a entrenar físicamente con máscaras faciales y que su tiempo de permanencia deberá ser reducida, en algunos casos, solo a 45 minutos.

“En condiciones normales y sin el stress de este momento, cuesta que algunos clientes cumplan las normas. Veamos qué pasa cuando lleguen y sepan que tienen que esperar para entrar”, señaló el trabajador.

Como es razonable, además de limitar el acceso de los clientes para garantizar el distanciamiento social, se señalizarán máquinas que no podrán ser usadas para garantizar la baja densidad de personas, especialmente en áreas bicicletas fijas en sus diferentes categorías, caminadoras, escaladoras y otros equipos de entrenamiento en espacios reducidos.

¡A entrenar rápido!

Por citar algunos ejemplos, en las sedes del Planet Fitness a través de un comunicado se exhorta a sus miembros que mantengan la distancia social de seis pies, usen las máscaras en todo momento, laven sus manos con frecuencia y que acudan a sus instalaciones solo si se sienten 100% saludables

En cadenas como Equinox, los miembros deben programar una cita. Mientras que en cadenas como New York Sport Club, con 22 sedes en la ciudad, se subraya a sus clientes que es posible que “no se le permita ingresar al club si se ha alcanzado a cinco personas por cada 1,000 pies cuadrados”.

“Me parece que esta reapertura muy esperada para miles de personas que son adictas a la cultura física, tendrá éxito solo si los clientes se muestran disciplinados. Se terminó la era de venir a socializar dos horas cada día en un gimnasio. Ahora entrenas rápido y le das chance a otro”, refirió un entrenador de una sucursal de Blink, en Queens.

En medio de las restricciones y nuevas reglas, las grandes cadenas anuncian su regreso este miércoles, pero otras instalaciones más pequeñas esperarán para adecuarse a las nuevas reglas que obviamente requiere de cierta inversión.

En el caso de las 22 sedes de YMCA se comenzará a reabrir el próximo martes 8 de septiembre.

“Todavía estamos trabajando en algunos detalles relacionados con los protocolos y pautas de la Ciudad de Nueva York, seguiremos compartiremos los detalles de la reapertura”, especifica en su página web.

Quienes regresen a los gimnasios deberán asumir que su tiempo de permanencia será reducido. (Foto: AFP Getty Images)

En etapa de ajustes

El Departamento de Salud de la Ciudad (DOHMH) continúa en un proceso de inspección virtual a través de una videollamada con los operadores de cada gimnasio, para confirmar el cumplimiento de toda la amplia cartilla de requisitos estatales.

“Siempre alentaremos a los neoyorquinos a hacer ejercicio y mantenerse activos, pero estas jornadas en el interior no está exentas de riesgos. Estamos siendo lo más innovadores posible con inspecciones virtuales para garantizar que el personal del gimnasio siga las pautas de seguridad “, dijo a El Diario el Dr. Dave A. Chokshi, comisionado de DOHMH.

Si no se aprueba la inspección, el gimnasio cerrará hasta que se corrijan las condiciones.

Reglas obligatorias para gimnasios:

De acuerdo con las normas publicadas por el Departamento de Salud del Estado existe una serie de normas más específicas que deberán atender los gimnasios y todos los centros fitness.

  • Los pañuelos, los buffs y las mascarillas de tela hechas en casa, no son cubiertas faciales aceptables para su uso en estos establecimientos.
  • Los gimnasios deben asegurarse de que las personas no compartan equipos como mancuernas y máquinas sin limpiar y desinfectar de manera adecuada.
  • Las duchas comunitarias deben mantenerse cerradas, mientras que las individuales pueden permanecer abiertas siempre que se asegure su desinfección luego de ser usada por cada usuario.
  • Se debe implementar las mejores prácticas para los baños comunes, como la instalación de barreras físicas entre los inodoros y los lavamanos.
  • Se exige la disponibilidad de jabón y toallas de papel sin que se requiera contacto con los respectivos dispensadores.
  • No están permitidos los servicios de hidromasajes, saunas y baños de vapor.
  • Se debe cerrar el acceso a las áreas de asientos comunes dentro del gimnasio.
  • Solo se permitirá las estaciones de llenado de botellas de agua, más no las fuentes de agua.
  • En la medida de lo posible se debe escalonar los horarios para que los empleados cumplan el distanciamiento social.

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