Lo que sucede en el cuerpo cuando eliminas los azúcares añadidos

En los últimos meses la tendencia de nutrición actual nos habla sobre la significativa relevancia de evitar el consumo de todo producto que se elabore con azúcares añadidos. Claro, lo hemos escuchado hasta el cansancio el azúcar es uno de los principales y más latentes enemigos de la buena salud.

De tal manera que de manera instintiva recurrimos a los métodos más tradicionales para decirle adiós a todo alimento azucarado: nos abstenemos de beber esa lata de Coca-Cola en el almuerzo, nos olvidamos de las ricas donas por la mañana y evitamos religiosamente un buen postre. Y sí, todas estas medidas son muy valiosas; sin embargo es muy probable que ciertos alimentos ricos en azúcares agregados se estén infiltrando en tu dieta y ni lo sabes.

Lo cierto es que existen muchos alimentos procesados, disfrazados como saludables que consumimos pensando fielmente en que nos hacen bien y a menudo tienen una gran cantidad de azúcares agregados en forma de jarabes, néctares, mieles y todo tipo de endulzantes. Si bien el consumo de fuentes de azúcar naturales, como es el caso de la fruta y la leche es aceptable en cantidades moderadas. Es de vital importancia seguir las recomendaciones establecidas por la Asociación Estadounidense del Corazón, que recomienda limitar la ingesta de azúcar en el caso de las mujeres a 25 gramos al día, mientras que los hombres deben consumir menos de 36 gramos al día.

Es por ello que eliminar o inclusive reducir el consumo de azúcares añadidas, es una decisión que simplemente cambiará tu vida. Descubre todo lo que puede hacer por tu bienestar.

1. Perderás grasa abdominal

Los alimentos ricos en azúcares añadidos no sólo son dañinos para la salud cardiovascular, digestiva, bucal e inmunológica. Según información liberada en un metanálisis de BMJ son sinónimo de calorías añadidas y peso extra. De tal manera que evitar este tipo de productos altamente procesados y azucarados, y optar por alimentos integrales y ricos en fibra, se deriva instantáneamente una cintura más delgada. La razón es simple, cuando el cuerpo se ve privado de azúcares agregados, comienza a quemar grasa abdominal en lugar de carbohidratos.

2. Adiós antojos

Aunque no lo creas el efecto de los carbohidratos simples y azúcares refinados como rosquillas, galletas y pan blanco, interfiere a nivel cerebral y pueden causar picos de dopamina, los cuales se derivan en incesantes antojos de azúcar. De hecho se cuenta con un estudio, publicado en Neuroscience & Biobehavioral Reviews en el cual se afirma que la ingesta de azúcar puede conducir a una mayor afinidad por los receptores opioides, lo que a su vez conduce a un mayor consumo de de azúcar y puede contribuir a la obesidad.

3. Aumentará tu energía diaria

Todo alimento rico en azúcares refinados se relaciona con marcados picos de azúcar en la sangre, es por ello que inmediatamente después de consumirlos es normal sentir un subidón de energía. Sin embargo todo lo que sube baja y estos cambios tienden a ser muy violentos y deterioran la energía, lo cual se deriva en fatiga y apatía. De tal manera que hacer un cambio en los hábitos alimenticios y optar por el consumo de refrigerios ricos en grasas saludables y proteínas de digestión lenta, es la mejor manera de equilibrar los niveles de energía a lo largo del día.

4. Menor riesgo de padecer diabetes tipo II

Se cuenta con una investigación muy relevante al respecto, la cual hace referencia en la Dieta Zero Sugar establece que por cada 5% de las calorías totales que consume de azúcares agregados, el riesgo de diabetes aumenta hasta en un 18%. Por lo tanto una persona que consume cerca de 1.800 calorías al día, su cantidad máxima de ingesta diaria de azúcar agregada debe ser de alrededor de 24 gramos, como ejemplo al beber una porción de 8 onzas de Coca-Cola te estarás excediendo por dos gramos. Imagínate todo lo extra que consumes a lo largo del día.

5. Mejor salud cardiovascular

Consumir demasiada azúcar se deriva en un aumento considerable en los niveles de colesterol “malo” conocido como LDL, es por ello que la Asociación Estadounidense del Corazón recomienda reducir los azúcares agregados para disminuir el riesgo de morir por una enfermedad cardíaca. Complementario a ello se cuenta con un estudio publicado en JAMA, en el cual se comprueba que aquellas personas que consume entre el 17-21%  de las calorías del azúcar agregada tenían un 38% más de riesgo de morir de enfermedad cardiovascular en comparación con los que consumían el 8% de sus calorías del azúcar agregada. 

6. Mejor concentración

Un alto consumo de azúcar interfiere inclusive con el rendimiento mental y el funcionamiento cognitivo. Y se cuenta con referencias científicas al respecto, según la Escuela de Medicina de Harvard, una dieta alta en azúcares refinados puede afectar la función cerebral y exacerbar los síntomas de la depresión. 

7. Experimentarás menos inflamación

Es bastante normal que asociemos a los alimentos salados con la hinchazón y por supuesto la causa principal es el exceso de sodio, que se deriva en retención de líquidos y hace que el abdomen se hinche. Sin embargo el azúcar también es una de las principales causas de la inflamación y el aumento en la grasa abdominal. Por lo tanto despedirte de ella será es una de las medidas más serias para olvidarte de esa constante inflamación.