Estafadores en Florida le rentaron una misma casa a 9 personas diferentes; hispana se entrega a las autoridades tras presión de familiares
Las autoridades en Homestead aún andan tras la pista de otros dos sospechosos del esquema; cuando una de las "inquilinas" llegó a ocupar la vivienda se topó con otro hombre que también le había pagado a los timadores mediante aplicaciones de transferencia electrónica de dinero
Comprar una vivienda puede tornarse en una verdadera complicación en algunos casos. Crédito: Unsplash
La hispana, miembro de un supuesto grupo de estafadores en Homestead, Florida, que le rentó una misma vivienda a al menos nueve personas, se entregó a las autoridades.
Univision 23 reportó este lunes que Priscilla Marie Contreras permanece encarcelada luego de que acudiera voluntariamente a la Policía ante la supuesta presión de sus familiares.
La mujer de 32 años compareció a una audiencia ayer en la que un juez dispuso una fianza de más de $40,000 dólares. Hasta este martes, la sospechosa no había pagado la suma, ya que debía demostrar que el dinero no proviene de las víctimas en el caso.
Contreras enfrenta cargos de robo en mayor cuantía, esquema organizado para cometer fraude, hacerse pasar por un agente inmobiliario sin licencia y usar un dispositivo de comunicación ilegalmente.
De salir en libertad temporalmente, la acusada deberá permanecer bajo arresto domiciliario y entregar su pasaporte.
Las autoridades aún buscan a los otros dos sospechosos de participar en el esquema. Estos fueron identificados como: Yordani Carriles Díaz, de 43; y Deinoser Bravo, de 47.
Una de las víctimas, identificada como Michelle González Paonessa, relató a medios locales que, cuando se mudó a la vivienda, ubicada en el 1522 de la Avenida 16 de dicha ciudad, ya le había pagado a los timadores $4,650 dólares en dos partes. Los pagos se hicieron a través de la aplicación Zelle.
Según relató la puertorriqueña, el dinero se le transfirió a una mujer que se hizo pasar por agente de bienes raíces en representación de los supuestos dueños.
Pero, cuando la mujer llegó a la casa, se topó con otro joven y su pequeña hija.
“Me dice: ¡yo me voy a mudar ahí! Y yo le digo, que yo me estoy mudando”, relató González Paonessa.
El otro “inquilino” le indicó a la boricua que también le había depositado dinero a los supuestos dueños. Sucesivamente, otros estafados arribaron con la misma historia.
