Informe revela que cerca del 15% de los niños estadounidenses recibieron tratamiento de salud mental en 2021
Investigadores de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades determinaron que los problemas de salud mental en las nuevas generaciones de niños estadounidenses son provocados por la llamada epidemia de soledad
Los niños estadounidenses blancos fueron los más afectados en su salud mental, esto con respecto a los representantes de las demás razas. Crédito: WOJTEK RADWANSKI | AFP / Getty Images
De acuerdo con datos revelados por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), casi el 15% de los niños estadounidenses recibieron tratamiento de salud mental en 2021.
Un informe señala que la cantidad de niños blancos con acceso a la atención para ayudarlos a superar su mala salud mental superó al número que recibieron los infantes de otras razas.
Asimismo, se destaca que los niños de 12 a 17 años recibieron mayor tratamiento con respecto a aquellos cuya edad rondó entre 5 y 11 años.
Los datos evidencian que 5.8 millones de niños son víctimas de ansiedad y 2.7 millones luchan contra la depresión.
En este sentido, diversos expertos coinciden en señalar que los problemas de salud mental en las nuevas generaciones de niños estadounidenses son provocados por la llamada epidemia de soledad, esto por carecer de conexión con otros infantes para crear pequeñas comunidades donde puedan convivir y jugar.
Mediante la información que arrojó la Encuesta Nacional de Entrevistas de Salud de 2021, los investigadores de los CDC determinaron que el 14.9% de los niños estadounidenses, cuya edad rondó entre 5 y 17 años, recibieron tratamiento por su salud mental en general.
De dicho segmento, el 9% los varones tomaron medicamentos para su diagnóstico; en tanto que sólo el 7.3% de niñas hizo lo propio.
Por otra parte, los datos mostraron que el 18.9% de los niños más cercanos a la adolescencia, recibieron tratamiento por su salud mental con más frecuencia que el 11.3% de los niños clasificados como más pequeños.
Mientras que los niños blancos evidenciaron mayor vulnerabilidad para de recibir terapia, medicamentos y tratamiento en general; los infantes de raza asiática fueron quienes menos demandaron atención psicológica.
De hecho, únicamente el 4.4% de los niños asiáticos recibió tratamiento, esto en comparación con el 10.3% de los infantes hispanos, con el 12.5% de los niños afroamericanos, y con el 18.3% de los niños blancos.
Otro factor que detonó los problemas de salud mental en los niños estadounidenses fue el entorno en donde viven, pues los infantes residentes de áreas no urbanas resultaron más demandantes de tratamientos de salud mental, esto con respecto a los que habitan ciudades medianas y grandes.
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