20 años de prisión contra hombre en Utah por golpear con tubo de metal y hacha a padre e hijo por ser mexicanos
Luego de gritar frases como "odio a los mexicanos" y "estoy aquí para matar a un mexicano", Alan Dale Covington atacó físicamente a José y Luis López en el exterior del negocio de llantas de la familia
Alan Dale Covington cumplirá 20 años de cárcel en Utah por atacar brutalmente a un padre y a su hijo hispanos en hechos reportados en el 2018.
Este lunes, Covington escuchó en silencio la condena por la golpiza a José y Luis López, padre e hijo, respectivamente, en el exterior del negocio familiar de llantas.
José no estuvo presente en corte para presenciar la sentencia, ya que según su hermana Verónica, aún sufre los efectos del Trastorno de estrés postraumático que le provocó el ataque.
“Desafortunadamente, ha tenido más dificultades para hacer frente al ataque”, indicó Verónica a The Salt Lake Tribune.
Tras el incidente, José cerró permanentemente el negocio.
En un juicio en febrero de 2020, Covington había sido declarado culpable a nivel federal por tres delitos de odio por atacar al padre y al hijo, así como por amenazar a Ángel López, hermano de José.
Covington, de 55 años, atacó a la familia en las afueras de “Lopez Tires”, cerca de 1600 South en Main Street de Salt Lake City, en noviembre de 2018.
En medio de la embestida, el hombre gritaba que estaba allí para “matar mexicanos”.
Covington entró en la tienda el 27 de noviembre armado con un tubo de metal y un hacha. Luego de gritar frases como “odio a los mexicanos” y “estoy aquí para matar a un mexicano”, blandió el tubo y golpeó en la cabeza a Luis.
“Salí a preguntar si necesitaba algo y lo primero que me dijo fue: ‘Ustedes mataron a mi hija, hijos de pu**'”, relató Luis según el reporte de NBC News.
“Yo le repetí: ‘No nos vas a matar. No puedes matarnos'”, añadió. “Entonces hizo swing (con el tubo) contra mí. Eso es lo último que recuerdo”.
Covington atacó a José por la espalda antes de ir hacia el tío del joven. Ángel, quien pudo escapar de la tienda sin resultar herido, alertó a la Policía.
Luis, que en ese momento tenía 18 años, sufrió heridas graves como consecuencia del ataque y pasó una semana en el hospital.
Como parte de la prueba que desfiló en corte, los fiscales mostraron al jurado fotografías en las que el mexicano aparecía inconsciente en una cama de un hospital, conectado a tubos y con sangre alrededor del ojo derecho, por el impacto de los golpes.
El caso López fue uno de los que llevó a un cambio en las leyes del estado en cuanto a crímenes de odio.
A la condena de prisión, le sigue una de cinco años de libertad supervisada.