Ventajas de deshidratar alimentos en casa

Deshidratar los alimentos nos da la oportunidad de almacenarlos durante más tiempos, sin que pierdan sus propiedades nutricionales

La deshidratación que es uno de los métodos más antiguos, que consiste reducción de la cantidad de agua

La deshidratación que es uno de los métodos más antiguos, que consiste reducción de la cantidad de agua Crédito: Shutterstock

Aprovechar los alimentos de la temporada, guardar un excedente de algún alimento que tengamos o para organizar nuestro menú, la conservación de los elementos siempre va a ser una buena opción, y si lo hacemos en casa puede traer más beneficios a la hora cocinar. La deshidratación es una forma muy útil de conservar alimentos.

La conservación de alimentos nos permite ahorrar tiempo, dinero y preservar la calidad de esos alimentos que podemos ingerir en otro momento.

Desde la antigüedad hay muchos tipos de conservación de alimentos y en la era moderna la industria avanza cada día en formas de preservar los alimentos, bien sea envasado al vacío, colocándole aditivos y conservantes.

La deshidratación, que es uno de los métodos más antiguos, consiste en reducción de la cantidad de agua por calor artificial a través de aire previamente calentado, superficies calientes, entre otros. Mientras que el desecado es la reducción de la cantidad de agua mediante el tratamiento del alimento en condiciones ambientales como sol o el viento.

Con estas dos técnicas podemos sacar el agua de los alimentos y dejarlos en estado que lo podamos consumir más adelante.

Para deshidratar los alimentos se pueden emplear varias técnicas, desde secar al sol directamente a secar en un horno a muy baja temperatura y con la puerta abierta.
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Deshidratar los alimentos

La deshidratación es un proceso a través del cual se elimina gran parte del contenido de agua, esto se puede lograr a través de calor, sin riegos a que pierdan sus propiedades nutritivas.

Con los alimentos deshidratados podemos hacer una gran cantidad de preparaciones y conservarlos en perfecto estado por más tiempo, incluso años, que si lo utilizáramos en su forma original.

Para deshidratar los alimentos se pueden usar varias técnicas, desde secar al sol directamente a secar en un horno a muy baja temperatura y con la puerta abierta.

También están otras opciones, como emplear un deshidratador, y seguir las instrucciones de uso para mejores resultados.

Ventajas de deshidratar los alimentos

Una investigación del Consejo Argentino sobre la Seguridad de Alimentos y Nutrición, destaca que deshidratar alimentos tiene ventajas como: aumenta la vida útil; los alimentos conservan las proteínas, hidratos de carbono y grasas o lípidos; el almacenamiento se facilita porque se reduce el peso y el volumen de los alimentos.

Una vez deshidratados los alimentos no es preciso almacenarlos en una instalación especial. También se reducen las posibilidades del desperdicio de alimentos y son fáciles de preparar.

Alimentos que se pueden deshidratar

Bien sea de manera natural o artificial, hay alimentos se puede deshidratar como las frutas, las hortalizas, las legumbres, los hongos, las especias, la leche y los huevos, carnes y pescados.

¿Cómo podemos utilizar los alimentos deshidratados? En preparaciones de cocina crudivegana, en snacks, como postres o platos principales, pasteles, pan esenio, galletas, entre otros.

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