El condado de San Diego, California, declara “crisis humanitaria” tras liberación masiva de migrantes en las calles

La Patrulla Fronteriza llevó desde la frontera a ciudades como San Diego, Oceanside y El Cajón en California al menos 7,800 solicitantes de asilo, parte de ellos son recibidos por patrocinadores, pero la mayoría se quedan en la intemperie

Han pedido al gobierno federal que asigne recursos y personas para ayudar a los solicitantes de asilo y ponerlos en contacto con sus patrocinadores y destinos finales.

Han pedido al gobierno federal que asigne recursos y personas para ayudar a los solicitantes de asilo y ponerlos en contacto con sus patrocinadores y destinos finales. Crédito: ALFREDO ESTRELLA | AFP / Getty Images

El gobierno del condado de San Diego, California, declaró una “crisis humanitaria” luego de que la Patrulla Fronteriza liberó a las calles a cerca de 7,800 solicitantes de asilo sin ningún tipo de asistencia.

Las autoridades han trasladado desde de la frontera a grupos de migrantes a las ciudades de San Diego, Oceanside y El Cajón, además de una estación del sistema Trolley de transporte.

Asimismo, la junta de Supervisores del condado de San Diego declaró unánimemente la emergencia humanitaria, por lo que urgió al gobierno federal hacerse cargo de atender a los solicitantes de asilo recién llegados.

Una parte de los inmigrantes fueron ayudados por sus patrocinadores, las personas los alojarán y se harán cargo de sus gastos mientras tramitan el asilo, pero muchos otros extranjeros permanecen por días en la calle.

Actualmente, la frontera entre México y Estados Unidos ha experimentado en los últimos días una nueva ola migratoria que ha saturado las ciudades de California, Texas y Arizona, y que condujo a que el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador se comprometiera el fin de semana con Estados Unidos a deportar esos migrantes en su territorio.

Por su parte, la Patrulla Fronteriza no ha respondido solicitudes de los medios de comunicación, pero a mediados de este mes de septiembre informó a las organizaciones civiles que había empezado a dejar grupos de migrantes en las calles para despejar sus instalaciones, que según ellos se encontraban hasta el colapso.

La Junta solicitó al gobierno federal que asigne recursos y personas para ayudar a los solicitantes de asilo y ponerlos en contacto con sus patrocinadores y destinos finales para evitar las liberaciones en las calles.

Resaltó también su oposición a los traslados de migrantes desde otros estados y jurisdicciones.

El condado enviará una carta con detalles al gobierno federal sobre las necesidades específicas de las organizaciones gubernamentales locales y comunidades, de acuerdo con una declaración bipartidista.

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