Presidente Biden declara emergencia por la contaminación por plomo en las Islas Vírgenes de Estados Unidos

El presidente Joe Biden ha declarado el estado de emergencia en las Islas Vírgenes de Estados Unidos después de que las pruebas realizadas en St. Croix revelaran niveles de plomo más de 100 veces superiores a los límites establecidos por la Agencia de Protección Ambiental (EPA).

Los residentes de St. Croix recibieron instrucciones de dejar de usar agua del grifo y las autoridades comenzaron a distribuir vales para agua embotellada.

Según un informe de la agencia AP, la contaminación por plomo plantea graves riesgos para la salud, especialmente para el desarrollo, el comportamiento y las puntuaciones de coeficiente intelectual de los niños. Sin embargo, los expertos ponen en duda la exactitud de los resultados y destacan posibles fallos en el proceso de prueba.

Crisis en las Islas Vírgenes de EEUU por plomo

El temor a la información engañosa ha perseguido a las comunidades que enfrentan crisis de plomo en el pasado, particularmente en las comunidades de mayoría negra.

En casos como Flint, Michigan y Newark, los funcionarios inicialmente ocultaron altos niveles de plomo, lo que dejó a los residentes inseguros sobre la seguridad de su agua. St. Croix, sin embargo, adoptó un enfoque diferente al informar rápidamente a los residentes sobre los resultados y declarar una emergencia.

Los estándares de la EPA para las pruebas de plomo implican la recolección de muestras de grifos domésticos, según se puede leer en un comunicado de prensa de la Agencia de Protección Ambiental.

Sin embargo, las pruebas de St. Croix que registraron niveles de plomo extremadamente altos se recogieron del medidor de agua, una desviación de los procedimientos estándar.

En septiembre, las pruebas iniciales realizadas en los grifos siguiendo las pautas de la EPA mostraron niveles de agua seguros. Sin embargo, persistieron las preocupaciones entre los residentes que informaron un empeoramiento de la decoloración del agua.

Las pruebas posteriores, esta vez en el medidor de agua, registraron niveles de plomo astronómicamente altos, lo que provocó una declaración de emergencia por parte del gobernador.

La autoridad del agua de la isla está trabajando estrechamente con la EPA para investigar la causa fundamental del problema. Se espera un informe final a mediados de diciembre que proporcione una respuesta más definitiva.

Si bien las pruebas no siguieron los procedimientos estándar, la EPA, por precaución, recomienda que los residentes que usan agua de servicios públicos eviten consumirla hasta que se completen más investigaciones.

St. Croix enfrenta un desafío único, ya que la contaminación por plomo no proviene principalmente de tuberías de plomo sino de accesorios de latón que contienen plomo.

El sistema de agua de la isla requiere atención y reparación, incluido el lavado de agua a través del sistema para reducir el plomo y el reemplazo de componentes que contienen plomo. Se espera que el trabajo de reemplazo dure entre 12 y 18 meses, y se planean importantes mejoras en los próximos años.

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