Adolescente murió baleado por la policía cuando intentaban evitar que se disparara en Nueva York

Un adolescente de 19 años que había amenazado con dispararse terminó baleado fatalmente por la policía que acudió a su hogar en Long Island (NY) y lo encontró con tres armas en su poder

Policia del condado Nassau

Policía del condado Nassau, Long Island (NY). Crédito: Andrew Theodorakis | Getty Images

David Clements, un adolescente que había amenazado con dispararse, terminó baleado fatalmente por la policía que acudió a su hogar anoche en Long Island (NY).

El hecho ocurrió alrededor de las 8:30 p.m. del viernes en una residencia en Stone Boulevard en Massapequa. La policía del condado Nassau dijo que respondieron a una llamada sobre un suicida y cuando llegaron hallaron a Clements, de 19 años, parado frente a su casa con tres armas en su poder.

Los agentes dicen que el adolescente amenazó con suicidarse e ignoró las repetidas llamadas de los oficiales para que bajara las armas. Después entró en su casa y volvió a salir, corrió por el camino de entrada y apuntó con un arma a los oficiales, describió ABC News.

La policía del condado Nassau afirma que fue necesario disparar para detener la amenaza a los oficiales y al público. Clements fue declarado muerto en el lugar.

El joven tenía antecedentes de enfermedades mentales y acceso a armas. No está claro quién llamó a la policía ni se había más personas en casa.

El Equipo de Homicidios del Departamento de Policía del condado Nassau continuará su investigación de este incidente junto con la Oficina del Fiscal General del estado Nueva York, como sucede en cualquier incidente en el que una persona muere durante un encuentro con la policía.

En diciembre un ex preso murió al balear a policías en el Bajo Manhattan que lo buscaban bajo cargos de armas y abuso sexual. En enero un hombre cortó a tres agentes NYPD con un machete mientras trataban de arrestarlo por violencia doméstica en un apartamento de East Flatbush, Brooklyn.

También la semana pasada un hombre murió en un tiroteo con la policía en un motel en South Brunswick, Nueva Jersey. Era sospechoso de varios delitos graves, incluyendo el robo a un obispo de Brooklyn (NYC) durante un servicio religioso en 2022.

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