Candidatos a alcaldía ofrecen soluciones a crisis de vivienda 

Hace dos años Sabrina Ortiz debió vivir la terrible experiencia de ver cómo su departamento se incendiaba. 

   De origen puertorriqueño, un par de meses antes de ese accidente Sabrina debió recibir a su madre que había sufrido un desalojo ilegal por parte de un propietario que le sacó sus cosas de su departamento sin tener un permiso aprobado por la corte.

   Ahora ambas viven en un refugio donde su situación es poco más que desesperada. El no poder regresar a su vivienda, “me ha provocado stress, angustia y depresión. Hay periodos que no ingiero alimentos ni duermo de las preocupaciones y el miedo”. 

   Ortiz dice que no es lo mismo si eso le pasara a un hombre, ya que ella está sola cuidando a su mamá. Así que ella espera recuperar ese u otro departamento de “renta estabilizada”, que es como se designa a la forma de regulación de alquiler que garantizar que algunas unidades sigan teniendo precios accesibles. 

   “El problema de la vivienda en la Ciudad de Nueva York se debe al desbalance de poder entre la industria organizada de bienes raíces que mantienen el promedio de la renta en Manhattan en 4 mil dólares”, dice sin dudar Genesis Aquino. “El sueldo mínimo de la ciudad ahora es de 16 dólares la hora y con eso no te va a alcanzar para pagar una renta; hay un desbalance económico” y la inequidad se resiste a un cambio “debido a la influencia que tienen los caseros en la alcaldía” agrega Aquino quien es directora ejecutiva de la organización Inquilinos y Vecinos, habita un departamento de renta estabilizada y es parte de la junta de directrices que regula las rentas en la  Ciudad de Nueva York.  

   Tanto Sabrina como Génesis se encontraron en la 19 Conferencia Anual de Inquilinos del West Side, evento organizado conjuntamente por Housing Justice for All, West Side Neighborhood Alliance y coordinadores de conservación de la vivienda. 

   En el encuentro, se detectaron algunos de los mayores problemas que enfrenta la crisis de vivienda en la Ciudad de Nueva York, muchos de ellos provocados por los mismos propietarios.  

1. Desalojos ilegales.
2. Precios de renta en constante aumento.
3. Paquete de vivienda envejecido.
4. Inquilinos en condiciones de pobreza sin acceso a reparaciones.
5. Colusión de propietarios con el gobierno central. 
6. Baja tasa de vacantes que llevó a que el 2023, solo el 1,4 % de los apartamentos de la ciudad de Nueva York estuvieran disponibles para alquilar, el porcentaje más bajo desde 1968.
7. Falta de viviendas aun mayor en las asequibles.

   “Lo que estamos pidiendo al alcalde o al que vaya a quedar en su lugar es que haya una política de congelar rentas” reclama la organizadora de inquilinos, Evy Viruet. “Sucede que cada año la renta sube y al final mucha gente se cambia de estado por no poder sostener el gasto en Nueva York” y el rostro de los barrios se comienza a transformar. 

   “La ciudad de Nueva York tiene a más de 73 mil personas sin hogar”, ilustra Genesis Aquino. Gente que hasta el día de hoy permanecen en alberges de gente sin hogar, un número que sin embargo puede crecer a 80 “debido a los muchos que viven en las calles o duermen en los trenes” apunta esta activista cuya última revisión registra que en todo el estado de Nueva York la cifra asciende a 92 mil personas sin hogar. 

   Antes de acudir a otra actividad del foro, Sabrina Ortiz dice que en la actividad donde pudo conocer las propuestas de siete aspirantes a la alcaldía, le convencieron sobre todo las de la senadora Jessica Ramos y las del excongresista Mike Blake.

Ensayo de debate

Además de Ramos y Blake, como parte de las actividades del foro de vivienda, se presentaron otros cinco precandidatos a quedarse con el cotizado puesto de ser alcalde de Nueva York. A estas alturas pareciera que se considera paralizada la reelección del actual alcalde Eric Adams, quien enfrenta una acusación penal por corrupción. 

   Para usar un término afín a este foro, digamos que la candidatura del actual alcalde fue desalojada este sábado. 

   Así que en un formato donde el periodista del medio Político, Jeff Coltin, interrogó a los invitados frente a un auditorio formado por más de cien inquilinos y sus líderes, las preguntas comenzaron a fluir. 

   Los cuestionamientos deseaban conocer si apoyaban las rentas congeladas, o qué harían con las personas sin hogar e inmigrantes que solicitan asilo, incluso cómo harían para mejorar los canales de respuesta para inquilinos desesperados en busca de algún servicio, hasta las vías por las que garantizarían que el gobierno de la ciudad siga apoyando viviendas asequibles. 

   Al inicio del encuentro, durante la presentación de los siete candidatos, el actual contralor Brad Lander se llevó los aplausos más ruidosos. Empero, al final de las exposiciones, tanto la senadora Ramos como el exasambleísta Mike Blake habían nivelado las simpatías. 

   Ante la pregunta de si como alcaldes promoverían la opción de las rentas congeladas, la respuesta se inclinó casi de manera unánime por el sí. Por ejemplo, el asambleísta por el distrito 36 de Queens, Zohran Mamdani, argumenta que “los propietarios que poseen al menos 100 apartamentos con renta estabilizada han aumentado sus ingresos en al menos el 10 por ciento”, por lo que su negativa a congelar rentas no es viable. 

   Invitó Mamdani a los propietarios que consideran no poder cubrir sus costos vía el alquiler a que se acerquen al programa de ayuda que mantiene el gobierno de la ciudad, al cual casi ningún dueño acude pues “prefieren gritar que se hallan en bancarrota a abrir sus libros de contabilidad” sospecha. 

   El ex contralor Scott Stringer dice que en algún momento ya ayudó a congelas rentas y que lo volvería a hacer. Misma visión de la senadora Ramos quien dice ha “cumplido con las congelaciones de alquileres durante muchos años aquí en la ciudad de Nueva York y estoy listo para realizarlo de nuevo”. 

   El contralor Lander igual presumió una carrera de 30 años tiempo durante el cuál y en coordinación con los vecinos, “preservamos viviendas asequibles” además de haber hecho “la mayor compra de conservación en la historia de la ciudad de Nueva York con 35, 000 unidades de viviendas estabilizadas”. 

   Sin embargo, el exasambleísta Michael Blake fue más allá al decir que no solo apoyaría las rentas congeladas, sino que “metería a la cárcel” a los malos propietarios que violen la ley. En su plataforma, dice que impulsará la creación de viviendas asequibles y de calidad, el diseño de tecnología para el bien y exenciones fiscales a los (buenos) propietarios. 

   Aclarando que él vivió la condición de persona sin hogar durante un tiempo, otro de los oradores, el exfiscal adjunto en el Distrito Este de Nueva York, Jim Walden, dijo apoyar asimismo la renta congelada sobre todo en los casos que los propietarios se nieguen a mostrar, vía sus libros de contabilidad, la inviabilidad de sostener una medida así. Dijo que buscaría aprovechar el poder de las alianzas público-privadas para acelerar la construcción de viviendas asequibles.

     En algún momento, a la dura propuesta de meter a la cárcel a los malos propietarios que violen la ley, incluso Blake y Walden apoyarían que el estado los despojara de las viviendas edificios para dárselos a organizaciones sin fines de lucro para que sean ellos que los administren. 

   Incluso el contralor Lander retó a los demás al decir que durante su campaña para ser alcalde “no recibiría ni un dólar” que provenga de desarrolladores mobiliarios tras la pregunta “¿qué influencia va a tener la industria de bienes raíces en su administración?”. 

   “Lo que no queremos es otra administración como la de Eric Adams donde las empresas de bienes raíces son las que controlan las políticas públicas de vivienda”, recuerda Genesis Aquino sobre esa última preocupación y culmina: “Las políticas públicas deben estar basadas en el bienestar del pueblo”. 

Un foro para educar inquilinos 

Durante la jornada del sábado, en medio de las exposiciones de los 7 precandidatos, emergió una figura que es la causa principal de las angustias vecinales: Los malos propietarios. 

   Con 70 por ciento de los ciudadanos de Nueva York pagando renta, las quejas de los inquilinos sobre este sector suelen repetirse. Como vimos, a los desalojos ilegales se suman la negativa de realizar reparaciones (como proporcionar calefacción a sus unidades) y la resistencia a respetar o promover rentas congeladas o estabilizadas. 

   Así que como forma de preparar a los inquilinos para que enfrenten dichas amenazas, esta conferencia anual realiza talleres para mostrar sus derechos a los adultos mayores, preparar a los inquilinos a sus visitas a la corte de vivienda, afiliarlos a una organización e incluso alumbrar las rutas para que los inmigrantes solicitantes de asilo enfrenten lo que parecen tiempos aciagos por venir. 

   “Con Donald Trump siendo elegido presidente en medio de una ola de ataques racistas, es importante que los inmigrantes conozcan sus derechos y cómo interactuar con el ICE”, se dijo en el panel “Conceptos Básicos de Inmigración”, que dirigieron la organizadora comunitaria Elisa Martínez, y la asistente jurídica Ivette Nuñez.

   Finalmente, a lo largo del foro se recordó a los inquilinos algunos de sus derechos como son el acceso universal a un defensor, a no ser expulsado de su vivienda sin una orden de la corte, a que la unidad de vivienda deba recibir reparaciones y contar con servicios como calefacción, además de su poder para afiliarse a alguna organización que los auxilie en la defensa de sus derechos.  

Otros canales de información 

• Los inquilinos con problemas o dudas pueden acercarse a metcouncilonhousing.org
• Los interesados pueden apoyar la Ley de Tierra Comunitaria que busca crear y preservar vivienda asequible en comunicades negras y latinas. Lo pueden hacer en nyccli.org/cla.
• En LawHelpNY.org se ofrecen servicios jurídicos gratuitos e información sobre las cortes de vivienda.