Por qué Donald Trump puede aspirar legalmente a la presidencia pese a las acusaciones federales

El expresidente Donald Trump ha sido acusado en dos oportunidades y podría enfrentar condenas penales, sin embargo, no se le impide postularse o asumir el liderazgo de la Casa Blanca.

Aunque el exmandatario republicano es el primero en enfrentar cargos penales, su riesgo legal no le impide postularse a su segundo mandato, incluso podría ser una “bendición política”, informaron especialistas en el tema.

Trump enfrenta 37 cargos por delitos graves vinculados con la retención de información clasificada y obstrucción de la justicia tras una investigación federal de documentos clasificados, de acuerdo con una muestra de la acusación revelada.

En otro un caso separado de dinero secreto que supuestamente pagó a la actriz porno Stormy Daniels, el magnate neoyorquino se declaró inocente de 34 cargos de falsificación de registros comerciales.

Asimismo, la Constitución de Estados Unidos no impide que Trump ocupe la presidencia. Siendo el favorito para la nominación presidencial del Partido Republicano, cumple con los tres requisitos para buscar el máximo cargo en la Casa Blanca.

• Tener al menos 35 años.
• Ser un ciudadano natural.
• Haber vivido en Estados Unidos por al menos 14 años.

Las acusaciones o las posibles condenas, no descalifican legalmente al expresidente para postularse para las elecciones presidenciales de 2024 o para servir si es elegido, informó Chris Edelson, profesor asistente de la Universidad Americana, especialista en el poder presidencial.

“El camino más claro para descalificar a Donald Trump como candidato para el cargo habría sido si el Senado lo hubiera condenado en uno o ambos juicios políticos”, expresó Edelson.

El Senado absolvió al republicano en sus dos juicios de destitución en 2020 por abuso de poder y 2021 por incitación a la insurrección, informó Axios.

En este sentido, la 14° Enmienda de la era de la Guerra Civil tiene una cláusula que prohíbe que cualquier persona que “participe en una insurrección” contra Estados Unidos ocupe un cargo electo sin la aprobación de dos tercios de la Cámara de Representantes y el Senado.

Tras el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021, el Partido Demócrata acusó a Trump de participar en una “insurrección o rebelión” contra Estados Unidos tal como se determina en la Enmienda 14, que prohibiría que ese individuo “ocupe cualquier cargo” si el Senado lo hubiera condenado.

Más allá del juicio político y la Enmienda 14, el único otro obstáculo para la presidencia es el límite de dos mandatos. Trump es uno de las casi dos docenas de presidentes que ha cumplido su mandato.

No obstante, el exmandatario está siendo investigado también por los esfuerzos de revertir los resultados de los comicios de 2020 por parte del fiscal especial Jack Smith, quien fue designado por el fiscal general Merrick Garland para que encabece las dos investigaciones federales contra Trump.

Las acusaciones en contra del candidato republicano podría impulsar un mayor apoyo de la base de votantes de Trump, que cree que es víctima de una cacería de brujas, expresó Heidi Kitrosser, profesora de derecho de la Universidad Northwestern.

La candidatura del expresidente, bajo esas circunstancias legales, no tienen precedentes, manifestó Kitrosser. “No creo que haya una imagen clara de cómo funcionaría exactamente y cómo se vería”, añadió.

En una recaudación de fondos enviada por correo electrónico, Trump anunció que: “El fiscal especial designado por Biden me ha ACUSADO en otra cacería de brujas”.

Con la intención de repetir lo que hizo en abril lanzando una recaudación de fondos luego de la acusación de Manhattan por un pago ilegal de dinero para silenciar a Stormy Daniels, consiguiendo millones de dólares en donaciones.

El juicio de Trump en la investigación de Nueva York está pautado para marzo de 2024, justamente en la temporada de las elecciones primarias, y Smith dijo que su oficina buscaría un “juicio rápido” en la investigación federal de documentos clasificados.

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