Meditación contra el estrés
Los muchos beneficios de la meditación han sido demostrados durante años y están al alcance de tu mano.
![Meditar es una práctica que se perfecciona si le dedicas algunos minutos diariamente.](https://eldiariony.com/wp-content/uploads/sites/2/2015/08/im_20140702_salud_140709897.jpg?resize=480,270&quality=80)
Meditar es una práctica que se perfecciona si le dedicas algunos minutos diariamente. Crédito: Shutterstock
La vida moderna, el trabajo, las responsabilidades y los problemas hacen que entres en un ritmo frenético en el que no te permites parar ni un minuto a estar contigo misma.
A través de la meditación recuperarás la conciencia, la serenidad, tu energía y te librarás del estrés. Al meditar, avanzarás por el camino de tu verdadera naturaleza, acallarás los ruidos que inquietan tu mente y alcanzarás la armonía.
El primero de los beneficios de esta práctica es la liberación del estrés. Al alejarlo de tu rutina, dejas de lado a la ansiedad y recuperas la alegría y la vitalidad.
La meditación funciona directamente sobre las funciones corporales: aumenta la producción de serotonina, lo que afecta positivamente al humor y emocionalmente estás más fuerte dado que florece tu creatividad, desarrollas tu intuición y posees mayor claridad mental.
Tu estado emocional afecta a tu salud física y por eso con la meditación desaparecen los dolores de cabeza, mejoran los de las articulaciones, se acaba el insomnio, ayuda a curar úlceras, mejora el sistema inmune y disminuye la presión sanguínea. Alcanzas mayor conciencia, descubres todo tu potencial, adquieres la capacidad de dar amor y recibirlo en un nivel superior. Vives en el “ahora” y dejas ir el “pasado”.
Meditar está al alcance de todos, sin importar la edad ni el sexo. Puedes acudir a algún centro donde realicen meditación guiada en grupo o practicarla sola en casa. Simplemente necesitas unos minutos, elegir un lugar agradable y tranquilo que esté a media luz. Busca una posición cómoda, si no tienes flexibilidad la posición de loto no te permitirá relajarte, es preferible sentarse en una silla.
Cierra los ojos, coloca tus manos sobre tus piernas con las palmas hacia arriba y procura mantenerte erguida. Toma conciencia de tu respiración, con la boca cerrada, inspira y expira lentamente por la nariz. Una vez relajada, imagina una llama de fuego. Piensa sólo en eso, cada vez que otra imagen llegue a tu mente, déjala ir. Visualiza la llama viajando despacio e iluminando por cada parte de tu cuerpo.
Éste es uno de los muchos ejercicios de meditación que existen. En aomm.tv te enseñan varios tipos, busca el que mejor se adapte a ti. Puedes empezar solo con respiraciones; deja entonces descansar tu mente, evita los pensamientos bucle.
Quizá prefieras no cerrar los ojos y fijar la mirada en un punto fijo para no dormirte. Lo importante es que seas constante, ya sea por la mañana o la noche y reserves todos los días 20 minutos para meditar.