Diane Guerrero: “Mi familia fue deportada mientras estaba en el colegio”
La actriz colombiana de la serie "Orange is the New Black" se quedó sola en Estados Unidos cuando sus familiares fueron enviados de regreso a su país de origen. El relato se ha publicado recientemente y habló de ello con BBC.
Meses antes de la acción ejecutiva del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, en torno a la reforma migratoria, la actriz Diane Guerrero escribía los primeros borradores de una composición sobre cómo la política de deportación del gobierno había cambiado su vida.
Ahora, su emotivo relato, publicado en el diario Los Angeles Times poco antes del anuncio de la Casa Blanca, la ha convertido en un rostro reconocible ya en una etapa tardía.
En una entrevista con la BBC, Guerrero, mejor conocida por su interpretación de Maritza Ramos en la serie de televisión Orange is the New Black y de Lina en Jane the Virgin, reveló que las versiones iniciales de su escrito no contenía casi detalles personales.
“Durante mucho tiempo lo estuve evitando”, dijo. “Creo que toda mi vida he evadiendo el tema porque es tan difícil de retomar”.
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El dolor se remonta al día en que Guerrero, entonces de 14 años, regresó de la escuela para encontrar una casa vacía.
Los vecinos le informaron que su padre, madre y su hermano mayor habia sido detenidos por agentes de inmigración que, eventualemente, devolvieron a la familia a Colombia.
Las luces de la casa estaban encendidas y ya habían empezado a cocinar la cena pero, desde entonces, Guerrero ha tenido que depender de sí misma.
“Ni una sola persona a ningún nivel del gobierno le prestó atención a mi situación”, escribe en el artículo.
“Nadie se fijó a ver si yo tenía un sitio para vivir o comer y, a los 14 años, me encontré básicamente sola”.
Dice que tuvo suerte porque pudo depender de la bondad de amigos y porque ha encontrado tanto éxito.
Pero, agrega, hay mucho niños separados de sus familias cuyas historias no se parecen en nada a la suya, aún dentro de su propia familia.
Cuando a su hermano lo deportaron, se vio forzado a dejar atrás a su hija, una infante. Criada en un hogar con un solo padre, indica, su sobrina ha tomado malas decisiones en su vida y enfrenta muchos desafíos.
“Actualmente cumple una condena de cárcel, viviendo la realidad de lo que yo actúo en la pantalla”, escribe Guerrero.
La actriz revela que ha recibido una oleada de respuestas, tanto negativas como positivas, en reacción a su artículo.
Muchos de los elogios han venido de personas en situaciones similares que se han adaptado a la vida sin miembros de familia y hasta de aquellos que simplemente perdieron un padre a temprana edad.
Guerrero cuenta que una mujer le dijo que el artículo inspiró su decisión de ser voluntaria de una causa a favor de la reforma migratoria.
Sin embargo, no todas las respuestas han sido positivas. Aunque Guerrero acepta que esos es entendible, es doloroso escucharlo.
“Pienso que todo el mundo tiene derecho a su opinión, aunque algunos de los comentarios son muy sesgados y no muy equilibrados”, explicó.
“Pero creo que estoy haciendo esto por esa misma razón, para tratar de cambiar la mentalidad”.
Jazz Shaw, del blog conservador HotAir, escribe que la historia de Guerrero es triste y que definitivamente sufrió una desilusión, pero que los culpables son sus padres y no el gobierno.
Shaw relata la historia de un amigo de la escuela cuya madre murió cuando era pequeño y su padre fue arrestado por malversación. Escribió que su amigo, Eddie, vivió con familiares hasta que se graduó.
Una de las cosas que Guerrero y Eddie tienen en común es que sus padres ambos fueron criminales, detalló Shaw.
“Si vienes aquí ilegalmente estás violando la ley y corres el riesgo de que te capturen y tengas que enfrentar el sistema legal”, escribió.
“Echarle la culpa a unos deshonestos que actuaron de mala fe no es ninguna excusa”.
Una columna de opinión complementaria al artículo de Guerrero en Los Angeles Times dice que hubo muchas respuestas similares entre los lectores.
Una de las cartas enviadas al editor, escrita por Stephanie Caldera, dice que Guerrero pudo haber encontrado el éxito si hubiese seguido a sus padres a Colombia en lugar de permanecer en EE.UU.
Otro, PJ Gendall, arguye que haber permitido a la familia de Guerrero a permanecer sería injusto con aquellos trabajadores que entran legalmente en EE.UU.
Aparte de la actuación, Guerrero funge como embajadora para el Centro de Recursos Legales para Inmigrantes, una organización que provee asistencia legal y educación, y también trabaja con grupos de apoyo.
Ella dice que primero se vinculo a la organización tras conocer a Grisel Ruiz, una abogada resitente, durante una ceremonia de galardores Latinas Cosmopolitan, a comienzos del año.
“Cuando conocí a Diane, tan pronto escuché su relato, automáticamente sentí que ejemplificaba la comunidad en la que trabajamos y los derechos que queremos promover”, expresó Ruiz a la BBC.
Ruiz declara que el anuncio del presidente Obama es un buen primer paso, pero está esperando una solución más amplia y permanente.
“Al final de cuentas tiene que haber una arreglo permanente”, concluyó Ruiz.