Una vivienda segura y saludable para todos
Ya no aguanto más con los ratones y el moho. Por años, he vivido en un apartamento de Staten Island con necesidad de demasiadas reparaciones. Vivo allí con mi hija, y hemos luchado constantemente para que el dueño solucionara los problemas que hacen que nuestra casa no sea un lugar saludable para vivir.
Durante los últimos seis años en nuestro apartamento, nos hemos ido con frecuencia sin calefacción ni agua caliente, enfrentado moho sin fin que crece en nuestros armarios, y sufrido las infestaciones de roedores que simplemente no desaparecen.
Hemos pedido al dueño una y otra vez que haga las reparaciones necesarias, pero, cuando por fin hace algo, sólo aplica soluciones rápidas. Por ejemplo, después de que empujamos duro para que él mreemplazara nuestros armarios mohosos, él finalmente cedió y los reemplazó, pero no reparó la fuga que causó el moho, así que éste pronto volverá.
La historia de mi familia es la historia de miles de familias de Nueva York que sufren condiciones de vida peligrosas e insalubres debido a los propietarios que ponen las ganancias por encima de las personas. En mi caso, las condiciones causadas por la falta de reparaciones necesarias han hecho que mi asma empeore; la semana pasada, tuve que ir al hospital a causa de una infección respiratoria. Y, como cualquier madre, me preocupo constantemente acerca de cómo nuestro apartamento poco saludable está afectando a mi hija.
Este tipo de problema afecta a los inquilinos de toda la ciudad. Es por eso que es tan importante que el Concejo de la ciudad de Nueva York apruebe un importante proyecto de ley este año, Intro. 543, que se dirige a las malas condiciones subyacentes que los propietarios como el mío ignoran tan frecuentemente.
Esto es lo que Intro. 543, introducido por el patrocinador principal concejal Ritchie Torres, haría: en el caso de que un propietario se niegue a tratar la condición subyacente que causa una violación de vivienda (por ejemplo, una fuga que produce moho), el proyecto de ley empodera a los inquilinos como yo a tomar nuestras demandas a la corte de vivienda.
Esto es importante porque, con demasiada frecuencia, cuando los propietarios finalmente actúan para enfrentar las violaciónes de la vivienda, no logran tratar el defecto físico o fallo en el sistema de construcción que crea la violación.
Un ejemplo familiar para muchos neoyorquinos: el propietario que pone un parche al techo con fugas o pinta encima del moho, pero no repara el tubo con fugas que está produciendo el problema.
Actualmente, HPD (la agencia de vivienda) sólo es capaz de investigar hasta 50 casos al año relacionados con las condiciones subyacentes. El departamento no tiene actualmente la capacidad de atender todos estos casos, por lo que los inquilinos como yo necesitamos los medios previstos por el proyecto de ley Intro. 543.
Es hora de que los propietarios acepten la responsabilidad de asegurar que los inquilinos como mi familia vivamos en apartamentos seguros y saludables.
Pero los propietarios que se benefician enormemente de los apartamentos no saludables no actuarán solos. Tenemos que obligarles, y eso requiere un cambio en la ley. Necesitamos que el Concejo Municipal apruebe la Intro. 543 lo más pronto posible. Si no lo hacen, demasiados neoyorquinos como yo no vamos a tener las herramientas para asegurar que los dueños de nuestros apartamentos hagan las reparaciones necesarias para hacer que los ratones y el moho desaparezcan.
-Dulce María Ramírez es miembro de Se Hace Camino Nueva York