Latinos también ocupan Wall Street y la nación
Todos hemos visto las protestas en las calles y las miles de personas de todas edades que durante las últimas semanas se han asentado en un pequeño parque en el distrito financiero.
El movimiento, “Ocupar Wall Street”, ha tocado la fibra sensible de gente en todo el mundo. Inicialmente, informes de noticias sugirieron que era un grupo de niños blancos mimados -enfadados por la enorme deuda de préstamos estudiantiles y la falta de trabajo. Dada esta interpretación errónea, muchos latinos pensaron, “¿por qué me debe importar esto? Yo tengo mis propios problemas tratando de encontrar o mantener a mi trabajo y familia”.
Pero después, las noticias de televisión mostraron a centenares de manifestantes siendo arrestados o golpeados por la Policía, todo el mundo -incluyendo a los latinos-, comenzó a prestar atención y escuchar al mensaje: “Somos el 99% de las personas que hemos sido abusados por el 1% de súper-ricos”.
Trabajadores que ganan $40-$50 mil o menos, están pagando un alto porcentaje de su salario en impuestos que los que ganan millones. Mientras los agentes financieros, corredores de bolsa y muchos CEOs de grandes empresas están ganando millones, también se atiborran con bonos glotones.
Hay personas perdiendo sus viviendas y pasando hambre, porque no tienen trabajo o fondos para alimentar a sí mismos y sus hijos. Aquellos que están enfermos o ancianos no pueden comprar los medicamentos que necesitan. Más aún, un estudio reciente del Consejo de Investigación de Pobreza y Raza encontró que los niños hispanos en este país sufren los índices más altos de hambre.
Estas son algunas de las razones por las que yo, puertorriqueño de 64 años -sin empleo y con subsidio por discapacidad- me reuní con los miles de personas y ayudé lanzar una revolución global. Mi vida entera he pagado impuestos, sin embargo, como muchos estadounidenses que en un momento han debido al gobierno impuestos de propiedad, he vivido una experiencia surrealista.
Lo único que tengo para sobrevivir -para pagar vivienda, comida, medicamentos- es la miserable suma de $900 al mes a través de beneficios de Seguro Social. Pero como le debía el Servicio de Impuestos Internos aproximadamente $2000 y sin trabajo no he podido pagar, han reducido mi subsidio por discapacidad a $200 al mes. Debido a sanciones e intereses, la deuda ha continuado creciendo y parece que nunca se detendrá.
Al mismo tiempo, los miembros del 1% tienen las normas fiscales manipuladas a su favor. Vacíos legales permiten que paguen pocos impuestos, y no contribuyan a esta nación de manera justa. ¡Ya basta! El 99% de las personas que hemos estado aturdidas por el desempleo, el hambre y la persecución hemos despertado de su sueño y vamos a promulgar el cambio.
América representa la igualdad -ha sido una mentira, pero nosotros, los del 99% queremos convertirlo en realidad. Los latinos tenemos el deber de hacer de este país lo que se supone que es. Todos necesitamos ocupar nuestras propias comunidades a lo largo de la nación. Estamos aquí y nos quedaremos aquí.