Houston recibió al Endeavour con emoción y nostalgia
El día fue tan histórico que miles de personas se detuvieron al costado de las carreteras por toda la ciudad para observar al transbordador Endeavour pasearse por los cielos de Houston antes de aterrizar montado en un Boeing 747 en el aeropuerto Ellington Field el miércoles 19 de septiembre.
El transbordador que tiene como destino final el California Space Center en Los Ángeles, California, llegó puntualmente al Ellington Field a las 10:45 am. Miles de personas armadas con celulares y cámaras estaban esperando.
“Es impresionante, solamente pensar que ese transbordador estuvo en el espacio me deja sin palabras”, dijo Sarah García, que hizo el viaje de Pasadena para estar presente en el evento.
Sin embargo, para algunos esta visita de Endeavour no fue nada más que un regalo de consuelo del gobierno estadounidense para esta ciudad, que gracias a sus contribuciones al programa espacial se ganó el reconocimiento del mundo pero que cuando llegó el momento de que los transbordadores de NASA iban a ser retirados y asignados a museos no se quedó con ninguno.
El transbordador Enterprise se fue a Nueva York; el Discovery a Chantilly, Virginia; el Atlantis a Meritt Island, Florida; y el Endeavour llegará en los próximos días a Los Ángeles, California.
“Houston merecía quedarse con este transbordador [Endeavour] por la historia y todas las contribuciones que esta ciudad tiene en el programa espacial. Pienso que el gobierno nos hizo una mala jugada”, comentó José Villareal, residente de Clear Lake.
Houston se tuvo que conformar con esta breve visita del Endeavour y con una réplica de un transbordador que llegó hace unos meses al Johnson Space Center.
Para los residentes del área de Clear Lake la visita causó mucha nostalgia ya que con las últimas modificaciones que se hicieron al programa espacial mucha gente en esta zona se quedó sin trabajo.
Y para el piloto Jeff Moultrie, que se encarga de dirigir la tripulación que está trasladando al Endeavour al California Science Center en Los Ángeles, esta será la última vez que trasladará un transbordador. Su departamento queda clausurado después de esta misión.
“Es nuestra última misión de este tipo y claro se siente algo de tristeza porque concluye una etapa del programa espacial que le dio tantas satisfacciones a este país. Pero a la vez uno entiende que llegó el momento de ir en busca de nuevos horizontes”, comento el piloto.
La NASA se encuentra en busca de nuevos retos que incluyen proyectos para llegar un día a Marte y a otras partes del sistema solar, pero con esta visita del Endeavour a Houston en los corazones de muchos houstonianos llegó el fin de uno de los más brillantes capítulos en las aventuras espaciales que se vivieron en la historia.