Brasil pasa apuros

SAO PAULO (NTX).— La selección brasileña se impuso ayer ante Serbia por 1-0 en lo que fue su último partido amistoso antes de su primer encuentro en el marco de la Copa del Mundo, el próximo 12 de junio frente a Croacia, en el Grupo A.

Scolari hizo dos cambios en el equipo inicial respecto al partido del martes contra Panamá, dio entrada a Paulinho y al capitán, Thiago Silva, ambos con molestias en el anterior duelo.

Con un Neymar menos inspirado que en el anterior choque, Brasil jugó más lento y con menor fluidez en las transiciones, frenadas por una selección serbia que le jugó de tú a tú al pentacampeón en la cancha del Morumbí, en Sao Paulo.

Los europeos plantearon un partido basado en el juego físico y el contraataque —uno de los puntos débiles de Brasil que Scolari quiere corregir—, y los delanteros Aleksandar Mitrovic y Dusan Tadic pusieron en apuros varias veces a los centrales Silva y David Luiz, sobre todo en el juego aéreo.

La primera parte terminó con empate entre ambos equipos y con un Brasil que, con las líneas muy separadas, era incapaz de hilvanar jugadas ante el muro defensivo propuesto por la visita.

El segundo tiempo se reanudó sin grandes novedades: el “Scratch du Oro”, que cambió a Oscar por Willian con el objetivo de encontrar más fluidez en la creación, se bloqueaba en el último cuarto de campo.

En el 58′, sin embargo, un error del central Branislav Ivanovic permitió que un centro sin peligro de Thiago Silva fuera controlado por Fred, quien tras resbalar logró desde el suelo impactar el balón y poner el 1-0, que silenció los abucheos que ya se escuchaban en el estadio.

Los sudamericanos trataron de reproducir el guión de lo que sucedió con Panamá y quiso aprovechar el gol para quitarse la presión y meter más goles, pero el equipo no lo logró, ante la potencia física y el orden defensivo de los balcánicos.

“Fue un partido difícil. Vamos a enfrentarnos a las mismas características contra Croacia”, dijo Oscar, al terminar el partido.