Ofrecerán visas a empresarios inmigrantes innovadores en NYC
La ciudad se alía con CUNY para proveer de visados H-1B, con el objetivo que un futuro se creen 700 empleos
¿Qué tienen en común Ebay, Google, Procter & Gamble o Tesla? Son solo algunas de las grandes compañías de EEUU que han sido fundadas por inmigrantes innovadores o hijos de inmigrantes. Con ello en mente y con la parálisis legislativa en cuanto a la reforma migratoria, la Corporación de Desarrollo Económico de Nueva York (NYCEDC) acaba de lanzar un programa para atraer a empresarios inmigrantes visionarios en el campo de la tecnología para que creen trabajos de futuro en la ciudad.
Se trata de IN2NYC, un plan con el que, inicialmente, se quiere atraer a 80 empresarios que se asienten en uno de los incubadores de siete campus de CUNY (BaruchCollege, City College of New York, LaGuardia Community College, Lehman College, Medgar Evers College, Queens College y College of Staten Island). Estos inmigrantes que montan su empresa en estas instituciones universitarias, y que atraen nuevos servicios, ingresos y oportunidades de empleo en sus vecindarios, estarán cualificados para obtener un visado para trabajador especializado que se conoce como H-1B.
Normalmente quienes optan a estos visados necesitan que un empleador les patrocine. Y además tener mucha suerte porque hay un número fijo de visados al año (65,000 al año y 20,000 más para estudiantes extranjeros que se han graduado en el país) que se distribuyen por lotería. El número de solicitantes excede en varios cientos de miles el de visados disponibles todos los años.
No obstante, para personas que trabajan con entidades sin ánimo de lucro o educación superior no hay restricciones, por ello, se ha llegado a este acuerdo con CUNY, “para abrir un camino a estos empresarios”, explicaba la presidenta del NYCEDC, María Torres-Springer, este jueves durante la presentación del IN2NYC.
A estos empresarios extranjeros se les requerirá que formen un consejo de dirección en el que habrá ciudadanos americanos o personas con greencard, para que se pueda crear el vínculo de trabajo que se requiere para este tipo de visado. Estos empresarios estarán empleados en la universidad durante más de la mitad de su tiempo de trabajo y colaborando con sus programas, lo que les deja el camino abierto a la H-1B sin cuota.
Para Torres-Springer, hija de inmigrantes filipinos, se trata de mantener la diversidad “que es uno de los activos de Nueva York” no solo en lo que respecta a etnicidad y origen sino también en materia económica. “Después de la caída de Lehman Brothers en 2008 vimos que era importante que hubiera grandes sectores en la ciudad distintos de las finanzas y los bienes raíces”. La ciudad, con el proyecto del campus tecnológico de Cornell quiere duplicar el número de ingenieros en 10 años y convertirse en un referente mundial en tecnología.
Torres-Springer dijo que el gobierno canadiense recluta a jóvenes extranjeros graduados en universidades estadounidenses con espíritu empresarial porque en este país no se les da oportunidades de conseguir un visado.
Los empresarios que opten a estas visas deben comprometerse a apoyar la misión de la universidad con la que formen el partenariado contribuyendo a las investigaciones académicas, desarrollando un curriculo, dando servicios de pasantías además de oportunidades de empleos, o convertirse en mentores.
700 empleos
El objetivo es que estos empresarios creen alrededor de 700 empleos. Se trata de trabajos en campos de alta remuneración que proveen buenas oportunidades a los trabajadores y estudiantes de la ciudad. Torres-Springer espera que el programa pueda expandirse en el futuro (de momento 80 empresarios es el número que puede absorber el sistema de CUNY) y atraer a más empresarios anualmente. Se trata del primer proyecto municipal que busca abrir camino para estos visados pero la presidenta del NYCEDC espera que sea un modelo que se replique en otras partes del país. “En Nueva York innovamos todos juntos”, resumía.