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Los Mets batean 11 jonrones en 4 juegos ante Indios y Filis
Travis d'Arnaud y Neil Walker festejan uno de los dos jonrones del segundo ante Filis este martes. Crédito: Getty Images
Un equipo poderoso en su pitcheo. Esa fue, durante su año de celebridad, la definición que se dio acerca de los Mets de Terry Collins.
En una temporada en la que llegaron a la Serie Mundial, fueron durante la primera mitad el peor equipo a la ofensiva. El mismo que llegó a acumular catorce partidos en los que no sumó más de dos carreras. Tanto que a mitad del camino trajeron a Yoenis Céspedes para que les diera una mano con el consabido impacto del guardabosques cubano. Aquello fue noticia.
Hoy el hecho que roba titulares son los once leñazos de cuatro esquinas bateados en sólo cuatro partidos por unos Mets desatados y hambrientos en los parques de Cleveland y Filadelfia.
Algo más
Antes de esta cosecha los moradores del Citi Field sólo habían disparado dos cuadrangulares en los primeros ocho juegos de arranque en el calendario.
Tan habituados como están los neoyorquinos a festejar a los Bombarderos de El Bronx a través de la marca Yankees, ahora se encuentran de sopetón con que los Mets le toman gusto a los batazos de largometraje.
“Son circunstancias de cada juego y de las cosas que tomes de cada pitcher”, dijo la noche del lunes Collins después de que sus muchachos le pegaran cuatro bombazos a los lanzadores de Filis en Citizen Bank Park camino de dominar 5-2 un juego que estuvo parejo hasta la sexta entrada.
Capitán a bordo
Mientras David Wright se solazaba con dos batazos de vuelta completa en un parque de pelota en el que ha disparado 22 jonrones, la suma más elevada conseguida por cualquier bateador que haya visitado el fortín de los Filis.
Con los números a la vista, Neil Walker, llegado de Piratas, ya suma cuatro en la campaña en 48 turnos al bate. A ritmo de Barry Bonds, ni más ni menos. Yoenis Céspedes ya suma tres y está en su ritmo de pasar de 30 antes de octubre. Walker y Céspedes cada uno con nueve remolques encabezan la línea de carreras producidas.
Lucen asimismo muchos más agresivos sobre las almohadillas estos Mets que ya suman 19 dobles. Michael Conforto ha aportado cinco, mientras Cabrera (3), Wright (3), Céspedes (2), Duda (2) y Granderson (2) ponen números respetables. En suma estos son unos Mets que batean.
Liderados en promedio por Asdrúbal Cabrera con un robusto .349, mientras otros tres de sus hombres están arriba de .280. Wright (.289), Conforto (.286) y Céspedes (.283).
Una reacción con el madero que le da músculo al proyecto de los Mets, tan dados a depender de Harvey, deGrom, Sydnergaard y Colón para resolver su anemia ofensiva.
Es verdad que esto es sólo una racha y que ningún equipo puede sacar once jonrones en cuatro partidos de manera consistente, pero es una manera de dejar atrás un comienzo incierto en el que apenas se anotaron 42 carreras, se dispararon 90 imparables para un pálido promedio de .226.
La noche del lunes los astros se alinearon para poner en órbita cuatro bambinazos y contruir una sólida victoria. Algo necesario porque no todas las noches se va a tener a un enorme Noah Syndergaard quien recetó ocho ponches en siete entradas de trabajo y alcanzó las 100 millas por hora en 17 de sus 94 lanzamientos y ya acumula 29 ponches en tres aperturas.
