Gobierno de Colombia y guerrilla del ELN abrirán diálogos en febrero
Proceso llega después de acuerdo de paz con las FARC
QUITO — Gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), la segunda guerrilla en importancia de ese país, superaron los escollos que los separaban y se citaron para abrir diálogos de paz, con los que buscan poner fin al conflicto armado que mantienen desde hace 52 años.
Las negociaciones arrancarán el 7 de febrero en Quito, en una mesa pública a la que seguirá la “fase formal de los diálogos”, pero antes, el día 2, la guerrilla liberará al excongresista Odín Sánchez Montes de Oca, al que tiene en cautiverio desde abril del pasado año, y el Gobierno indultará a dos integrantes del grupo armado.
Estos son dos de los puntos de un comunicado conjunto que ambas partes dieron a conocer en la capital ecuatoriana y que establece también “la habilitación de los gestores de paz del ELN”.
El pacto cierra una ronda de contactos exploratorios iniciados entre las partes el 13 de enero en Ecuador y coloca de nuevo el proceso en el punto en que quedó interrumpido el 27 de octubre de 2016, cuando iba a instalarse la mesa pública de negociaciones anunciada de nuevo hoy.
Ese día, el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, aplazó el viaje de los negociadores del Gobierno a la espera de la liberación de Sánchez, secuestrado en el departamento del Chocó, noroeste de Colombia, luego de canjearse por su hermano Patrocinio, quien permaneció en manos de la insurgencia durante dos años y medio.
El comunicado conjunto fue leído en un acto celebrado en el Salón de Próceres de la Cancillería, en presencia de representantes de ambas partes y de los países que actúan como garantes en el proceso: Brasil, Chile, Cuba, Noruega y Venezuela, además de Ecuador.
Tras el anuncio, el jefe negociador del Gobierno colombiano, Juan Camilo Restrepo, dijo que las conversaciones formales deben llevar a lo que Santos ha llamado “la paz completa”, tras la alcanzada con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
La agenda de la negociación, según Restrepo, debe llevar “al puerto de la paz” negociada y desarmada y a conseguir que en Colombia se pueda hacer política sin armas.
Debe conducir a “una paz en la que no siga habiendo víctimas inocentes del conflicto armado, una paz en la que, respetando la Constitución y las leyes de Colombia, podamos encontrar fórmulas que hagan más equitativa y mas progresista la sociedad colombiana”, dijo.
Abogó por un clima pacífico con respeto a los derechos humanos, a los derechos de las minorías y al derecho que la Constitución colombiana “señala como un deber: el derecho y el deber de la paz” que “Colombia requiere y que Colombia se merece”, apostilló.
El jefe negociador del ELN, “Pablo Beltrán”, consideró, de su lado, que el acuerdo para el arranque de las negociaciones “es un triunfo de la participación como medio de presión para lograr los cambios” que demandan los colombianos y confió en que sirva para “hacer del continente una zona de paz”.
También señaló que a partir de ahora se podrá desarrollar una agenda de seis puntos “cuyo propósito es superar el conflicto armado y crear condiciones para las transformaciones que dignifiquen a la sociedad y a la nación colombiana”.
“Esperamos que desde todas las regiones y sectores de la patria confluyan miles y miles de voces y esfuerzos para hacer cambiar a Colombia. A este propósito aspira a servir esta mesa”, aseveró.
El canciller ecuatoriano, Guillaume Long, expresó la “alegría” del Gobierno ecuatoriano por el comienzo de las conversaciones y reiteró el compromiso del Ejecutivo, de su presidente, Rafael Correa, y del pueblo ecuatoriano para seguir acompañando “la causa de la paz”.
“La paz de Colombia es la paz de Ecuador, es la paz de nuestra región, es la paz de nuestra América”, remarcó Long.
El mandatario colombiano había adelantado horas antes desde Davos (Suiza) que los negociadores anunciarían detalles del inicio de las conversaciones, lo que había considerado “una muy, muy buena noticia para el país” andino, dado que el Gobierno ha intentado lanzar las conversaciones oficiales durante “más de tres años”, señaló.
Santos expresó su agradecimiento al Gobierno de Ecuador y a Correa, cuya ayuda a la hora de acoger las negociaciones en esa nación y facilitar todo este proceso ha sido “extremadamente útil”