Demandan a un profesor de historia por investigar a un “niño fantasma”
El hecho ocurrió en Uruguay y se viralizó a través de las redes sociales
MONTEVIDEO.- Una foto que una niña tomó dentro de un cementerio durante una recorrida con su grupo de colegio y el profesor de historia disparó un debate que se reaviva con un juicio por casi un millón de dólares.
Un docente mediático -apasionado en la búsqueda de señales del pasado, tesoros ocultos, historias sin explicación y fenómenos extraterrestres- y un periodista que dio crédito a la historia de un niño fantasma, han sido demandados por la familia de un niño que murió hace 44 años, por considerar que hay responsabilidad en derechos de imagen y privacidad.
El caso había logrado repercusión en redes sociales y algunos medios de comunicación en mayo pasado, luego que alumnos de este profesor avisaban que habían fotografiado a un fantasma.
El docente José Buslón había llevado a sus alumnos del Liceo Nº 2 “Antonio Grompone” de Salto (que se une por puente con la ciudad entrerriana de Concordia) a una visita por el cementerio de esa ciudad, con el fin de observar símbolos y figuras, para realizar un registro clasificado y tratar de descubrir historias que puedan encerrar.
Una adolescente tomó fotos y se sorprendió cuando las copió en su computadora, porque le pareció que en una de las tomas había un niño parado dentro de un panteón, detrás de una puerta de cristal.
Eso entusiasmó al profesor y el caso comenzó a divulgarse como “el niño fantasma de Salto”, tanto en redes como en algunos programas de radio y magazine de televisión.
José Buslón, Lockarth y Canal 12, demandados por el fantasma del niño del cementerio de Salto https://t.co/i3070igU7z
— Diario Salto Al Dia (@saltoaldiauy) February 12, 2017
“Nos paramos frente al panteón para hablar de las flores y sus características simbólicas; los estudiantes hicieron sus registros y nos fuimos” y “estaríamos hablando de tres imágenes de niños en ese mismo lugar”, dijo el profesor a medios de Salto.
En el canal 12 de Montevideo se emitía el programa “Voces Anónimas” que se dedicaba a leyendas urbanas, o casos presentados como “sobrenaturales” o “paranormales”. Un equipo del programa, con su conductor Guillermo Lockarth, se trasladaron a Salto para hacer notas sobre el caso.
Ante la difusión, una profesora jubilada le comentó a Buslón que la imagen que parecía verse en la foto, le hacía acordar a un niño que murió en un accidente de tránsito en 1972, y que había sido amigo de su hijo.
Eso añadió entusiasmo al docente, que junto a sus alumnos salió a buscar testimonios de gente que pudo conocer a ese niño y sobre registros de entierros en el cementerio.
Volvieron al cementerio y dijeron que los datos que tenían indicaban que aquel niño había sido enterrado en ese lugar, pero luego llevado a otro sitio.
No los detuvo la versión de los dueños del panteón, que dijeron que no habían puesto a ese niño en ese lugar, y recogieron un testimonio de un sepulturero, que encajaba un poco más en su relato del fantasma.
Consiguieron dar con dos mujeres que eran hermanas de aquel niño, y que habían nacido luego de su fallecimiento, las que no se mostraron a gusto con el tono que estaba tomando el caso.
Como hacía cada año, “Voces anónimas” publicó un libro sobre los casos tratados en el año, sobre espíritus, fantasmas y otros relatos misteriosos.
Para el profesor de historia eso fue otra oportunidad de dar notas sobre la foto que había tomado su alumna.
La familia del niño a que tomaban como referencia para la “foto del fantasma” pidió en forma personal y por escrito que respetaran su intimidad. Pero el docente entendió que lo principal era la investigación.
Algunos observadores comentaban que la imagen que se veía en la foto era el reflejo de otros de los niños que estaban en el paseo.
La familia propietaria del panteón emitió un comunicado en su momento con aclaraciones sobre especulaciones que se hacían respecto a símbolos del monumento fúnebre.
Pedido de la justicia
El miércoles 8, el profesor Buslón recibió una citación judicial para una audiencia de conciliación con los familiares del niño fallecido en 1972.
Según informó el diario El País, la citación dice que “corresponde el cobro de pesos emergentes de responsabilidad extracontractual por difusión de imágenes, historia personal y privacidad de los comparecientes por difusión de hechos sin autorización” y aclara que “la suma reclamada” de USD 900 mil, “no incluye posteriores reclamos por derechos de autor e imagen“.