La contribución a las artes y la cultura de Casita Maria

Un nuevo estudio del Proyecto sobre el impacto social de las artes de la Universidad de Pensilvania ilustra la manera en que el arte mejora la vida de los habitantes de una ciudad. No es que la cultura “causa” mejoras en la salud o en el desempeño escolar, pero sí es cierto que la cultura está relacionado con el bienestar social y otros resultados positivos. Durante décadas, la cultura y el conocimiento académico han sido el núcleo de la misión del Centro para las Artes y la Educación Casita Maria. Los niños, desde el jardín infantil hasta el 5to grado, aprenden a tocar el violín y el piano, además de cantar en un coro y participar en presentaciones de teatro musical. Los estudiantes de la escuela intermedia bailan, y los de la escuela secundaria aprenden fotografía y crean revistas.

No debe subestimarse la importancia de la cultura y las artes y, dentro de lo posible, los padres y tutores deberían intentar exponer a los niños y jóvenes al arte y la cultura. El arte ayudará a la próxima generación de niños a adquirir habilidades motoras, desarrollar el lenguaje y despertar la creatividad. Si bien es importante que los jóvenes aprendan todo lo que hay que aprender sobre tecnología, también se beneficiarán del conocimiento cultural a la luz de la sociedad cada vez más diversa del mundo en que vivimos.

Sabemos que el hemisferio izquierdo del cerebro se encarga de la lógica y el análisis, y que el derecho es responsable de la creatividad. La educación tradicional ayuda a desarrollar el hemisferio izquierdo; sin embargo, es necesario que haya actividad en ambos. Una cantidad significativa de estudios demuestran que existe una estrecha correlación entre la presencia del arte en la niñez y el éxito posterior en la vida adulta. Los exalumnos de Casita Maria, como Tito Puente y Tania Ramírez, son ejemplo no solo de que el arte puede llevar al éxito, sino también de lo importante que es retribuir a la comunidad. Algunos artistas ganadores del Grammy, entre los que se cuentan Arturo O’Farrill y el difunto Dave Valentin, apoyan a Casita Maria y su labor con los niños, las familias y la comunidad.

Debido a que la financiación para las artes está en riesgo, debemos buscar formas de aumentar la importancia que tiene nuestro compromiso para que las artes sigan formando parte de la vida de nuestros niños, familias y de la comunidad. Celebre las obras de arte de sus hijos, tenga a la mano crayones, fomente la danza, el canto y todas las formas de expresión artística, y lleve a sus hijos a museos y eventos culturales (muchos de los cuales son gratuitos). En las comunidades pobres y desfavorecidas, donde ya existe una escasez desproporcionada de recursos, los recortes en el sector de las artes serían devastadores y nos privarían de tener el próximo Tito Puente o la próxima Rita Moreno. Debemos unir fuerzas y hacer todo lo posible por salvar a las artes.

En respuesta al artículo: http://repository.upenn.edu/cgi/viewcontent.cgi?article=1001&context=siap_culture_nyc

-Haydee Morales es la directora ejecutiva de Casita Maria.