¿Por qué el 5 de septiembre es la “fecha límite” de DACA?
Una coalición de nueve estados y un gobernador son la clave de esta batalla migratoria
Primero lo primero: el 5 de septiembre no es el fin del programa para “Dreamers”, es decir, aunque el presidente Donald Trump decida desaparecerlo, el proceso no sería sencillo.
Sin embargo, esa fecha es la que puso una coalición de nueve estados para presionar al mandatario a dar por terminado esta iniciativa implementada por el expresidente Barack Obama, que está beneficiando a unos 800,000 jóvenes indocumentados que llegaron a los Estados Unidos a temprana edad.
El grupo integrado por los gobernadores de Alabama, Arkansas, Kansas, Luisiana, Nebraska, Carolina del Sur, Tennessee, Idaho, Virginia Occidental y el gobernador de Idaho, Butch Otter.
Todo comenzó formalmente cuando el procurador de Texas, Ken Paxton, envió una carta al fiscal general Jeff Sessions, donde se le pidió que la administración federal diera por concluido ese programa o de lo contrario interpondrían una demanda.
El presidente Trump había dicho que DACA “era un tema difícil” para él, pero tampoco fue contundente al señalar que lo mantendría, que sería intocable, y ahora hasta podría estarlo utilizándolo como moneda de cambio lograr los recursos para la construcción del muro fronterizo.
“Al igual que DAPA, DACA otorga unilateralmente la elegibilidad para la autorización de trabajo y la presencia legal sin autorización estatutaria del Congreso”, se acusa en la carta.
En su misiva no solicitaron la revocación de los permisos existentes, tampoco la deportación de los beneficiados con esa iniciativa, aunque ya habido varios casos de jóvenes detenidos por “La Migra”, a pesar de estar protegidos.
La defensa legal de DACA lleva muchos años por parte de las organizaciones civiles y esta ocasión no es la excepción, como ya lo han demostrado con marchas en varios estados.