Trabajar más horas, la clave para mejorar los ingresos
Quienes ganan menos han aumentado sus horas de trabajo un 24.3% desde 1979 para compensar subidas débiles de salarios
Las mejoras en los ingresos de muchos trabajdores de bajos recursos en EEUU ha llegado en los últimos dos años de la mano de la subida de los salarios mínimos en muchos estados y del hecho de que algunas grandes empresas han tenido que adaptarse a estos.
Pero también porque están trabajando más horas.
Según ha verificado el Economic Policy Institute (EPI), entre 1979 y 2016 los ingresos anuales medios de los trabajadores (entre 25 y 45 años) crecieron un 30.2%. Pero eso es una media que enmascara una realidad que ha sido muy diferente para distintos tipos de trabajadores. Los ingresos pueden subir porque suba la compensación por horas, porque se trabajen más o por una combinación de ambas cosas.
La realidad es que los que más ganan han visto mejorar sus ingresos anuales un 88% en ese periodo de tiempo trabajando pocas horas más mientras que los que menos ingresan apenas ha visto una mejora del 25% pero poniendo más horas en su semana.
“Para la mayoría de los trabajadores, entonces, el incremento de los salarios ha estado determinado por su capacidad para trabajar más horas”, explican Valerie Wilson y Janelle Jones en un estudio dado a conocer recientemente. “Nuestos análisis muestran que quienes normalmente ganan menos y trabajan menos horas han sido los que más han incrementado sus jornadas laborales desde 1979. Desafortunadamente las horas del día son siempre las mismas y tienen poco control sobre sus horarios por lo que hay un límite a lo que los trabajadores pueden hacer para mejorar sus salarios trabajando más”, concluyen.
Los datos que han recogido estas economistas apuntan a que en esos años los trabajadores que ganaban menos han aumentado las horas de trabajo un 24.3% mientras que la clase media ha tenido que añadir un 9.4% más de horas y los que más ganan un 3.6% más.
Con todo, son los que menos ganan los que trabajan menos horas, a pesar del aumento. Y es una queja fundamental de muchas de las personas que trabajan a tiempo parcial y con horarios variables. Muchos de ellos claman que para salir adelante necesitan más horas de trabajo. A pesar de las subidas de salarios mínimos, muchas familias con un solo ingreso siguen estando por debajo del umbral de la pobreza y no siempre se les asignan trabajos que alcancen las 40 horas a la semana.
Otra de las cosas que preocupan a EPI es que la cantidad de hombres que no trabajaban en un año se ha casi duplicado para pasar del 6.3% en 1979 al 11.9% hace dos años. En el caso de las mujeres la tendencia ha sido la contraria aunque trabajan menos horas en general por que se hacen más cargo de las responsabilidades del hogar.
Las mujeres negras han sufrido más la crisis que el resto, puesto que no han recuperado las horas perdidas tras 2009. Las latinas son las que menos participan del mercado laboral porque cuidan del hogar y los hijos.
Los hombres negros están trabajando menos horas que en los setenta porque tienen más dificultades para sumarse al mercado de trabajo y más de la mitad de estos y de los hispanos ganan menos que el salario promedio.