Alumnos se desnudan durante defensa de tesis en Cornell
Docenas de personas participaron en la protesta
Letitia Chai, una estudiante del último año en la Universidad Cornell, se quedó en ropa interior durante la defensa de su tesis de grado para protestar contra su profesora.
Otras 28 personas se unieron a su protesta, porque supuestamente la docente había criticado previamente la ropa de la joven, especialmente unos pantalones de jean que aparentemente eran muy cortos.
Sin embargo, 11 de 13 estudiantes de la clase emitieron una declaración diciendo que apoyaban la protesta de Chai, pero no su versión de lo sucedido. Escribieron que la profesora sólo estaba tratando de transmitir la importancia del profesionalismo en situaciones de hablar en público, y que además aboga por las mujeres y las minorías y se había “disculpado en más de una ocasión” por el incidente.
Chai tomó la medida “contra las creencias opresivas”, según dijo en Facebook.
“La profesora procedió a decirme, frente a toda mi clase, que estaba invitando a la mirada masculina lejos del contenido de mi presentación y sobre mi cuerpo”, escribió Chai.
“Creo que estaba tan desconcertada que realmente no sabía cómo responder”, afirmó luego en declaraciones al periódico universitario Cornell Daily Sun.
Un alumno internacional se puso del lado de la docente, diciendo que era obligación moral de Chai vestirse de manera más conservadora.
La profesora le preguntó luego qué pensaría su madre de su ropa, y agregó que tenía una hija por la que estaba preocupada, relató Chai.
“Mi madre es una profesora de estudios feministas, de género y de sexualidad. Ella está bien con mis pantalones cortos”, le respondió la alumna. Y advirtió que iba “a dar el mejor discurso de mi vida”, mientras planeaba su plan de desnudarse.
Así, escribió en Facebook invitando al público a su presentación de tesis, pidiéndoles que usaran su ropa interior favorita, “en solidaridad con cualquier persona a la que se le haya pedido que cambie su apariencia para hacer sentir más cómodos a los demás”.
Su presentación fue transmitida en vivo e incluso sus padres estaban mirando desde Corea. Cuando comenzó a quitarse la ropa, alrededor de 28 de las 44 personas en la habitación se unieron a ella, según New York Post.
La profesora, Rebekah Maggor, afirmó que no les dice a sus estudiantes qué ponerse o cuál es la vestimenta adecuada, pero “les pido que reflexionen por sí mismos y tomen sus propias decisiones”.