La historia de superación de Yarelis Lebrón: “El huracán María me convirtió en corredora”
Hace año y medio esta puertorriqueña pesaba 300 libras. Este sábado correrá la media maratón “2018 Popular Brooklyn Half”
“El huracán María fue lo que me impulsó a correr”, asegura la boricua Yarelis Lebrón. En noviembre de 2016 pesaba 300 libras, hoy ha perdido casi la mitad de su peso y el deporte se ha convertido en una parte muy importante de su vida.
En la media maratón de Brooklyn (2018 Popular Brooklyn Half) de este fin de semana correrán miles de personas, miles de historias. Pero hay una en concreto, una historia de fuerza y superación, que merece la pena ser contada. Yarelis, de 36 años, convirtió una tragedia, el huracán María de Puerto Rico del año pasado, en un motor que la animó a convertirse en corredora.
Yarelis participará este sábado en la carrera de Brooklyn, pero la verdadera maratón es el camino que ha emprendido este último año.
“Con 35 años yo no podía ni subir ni bajar escaleras sin dolor, tenía diabetes, alta tensión y tomaba muchísimos medicamentos. No podía seguir así y decidí cambiar mi vida radicalmente“, asegura Yarelis.
Esta corredora se sometió a una cirugía gástrica que consiste en reducir su estómago un 70%, lo que provoca grandes pérdidas de peso.
“Decidí pasar por la cirugía porque ya lo había intentado todo y sabía que eso me iba a ayudar. Hay que perder peso antes de pasar por quirófano, me pidieron que perdiera 30 libras y perdí 75″, asegura.
La cirugía fue en mayo y para agosto ya había alcanzado su peso meta, 175 libras. Un poco más tarde bajó a las 164.
Sacar fuerza de una tragedia
“Fue el huracán el que lo empezó todo”, dice Yarelis. María, un ciclón tropical extremadamente poderoso, devastó las Islas de Barlovento y la isla de Puerto Rico en el Caribe. Yarelis y su familia se quedaron sin luz durante meses.
“Tengo tres hijos y fue muy duro para nosotros, hasta marzo hemos estado viviendo sin luz o electricidad”, comenta la deportista.
“El huracán y todo lo que conllevó para mi familia y para Puerto Rico, me generó muchísima ansiedad y eso me llevaba a la comida. Ahí es cuando todo empezó. Yo ya me había operado pero debía mantenerme. Decidí salir a correr todos los días y poco a poco corría más y más. He participado en varias carreras de 5k y en una de 10k y ahora estoy lista para esta media maratón”, recalca Yarelis, que usó esa ansiedad para centrarse en su salud a través del deporte.
Yarelis, como tantos otros puertorriqueños tuvo que sobrevellar una situación muy complicada. Además el ser madre trabajadora con tres hijos no ayudaba a su ansiedad. “Veía a la gente correr y pensé… yo también puedo hacerlo. Solo estaba reteniendo a la corredora que llevaba dentro“, asegura.
Este camino que emprendió hace más de un año, no solo ha cambiado su vida, si no la de toda su familia. Yarelis ahora se asegura de que sus hijos y su marido coman lo más sano posible. “Intento evitar que tomen sodas y negocio con ellos para que elijan hamburguesa o patatas, no los dos. Además, en casa hay comida más sana. Solo por eso, y sin hacer ejercicio, mi marido ha perdido 40 libras“.
Una dura rutina
Pero no ha sido un camino fácil ni mucho menos. Los primeros cuatro meses tras su operación Yarelis solo podía consumir líquidos, “piensas que esa es la peor parte. Pero no. Lo más duro es mantener el estilo de vida cuando ya estás en tu peso y no caer en lo de antes”, confiesa.
Su rutina es digna de admiración: Se levanta a las 3:45 de la mañana, hasta las 5:00/5:30 am hace ejercicio, luego prepara a sus hijos para la escuela, va a trabajar y aprovecha su hora de comer para hacer algo de pesas. Después del trabajo, sale a correr.
“Es duro, pero yo escucho a mi cuerpo y cuando veo que no puede más, lo dejo descansar. No fuerzo. No pasa nada si no hago ejercicio un día. Aun así, hay gente que no lo entiende. Dicen que estoy obsesionada y hacen que dude de mi misma. En realidad es envidia porque yo he logrado mis metas y ven que ellos no”, dice Yarelis.
El resultado merece la pena
Por suerte, el seguro de Yarelis ha cubierto la gran mayoría de sus gastos médicos (la operación puede cuesta 20,000 pesos en Puerto Rico). Aún así, los gastos de los análisis y los diferentes médicos la han llevado a gastarse alrededor de 3,000 pesos.
“Lo haría mil veces más, la salud que tengo ahora no tiene precio, ya no consumo casi ningún medicamento. Según mi última revisión, estoy perfecta”, recalca.
Ahora y tras mucho entrenar, Yarelis está lista para su nuevo reto: la media maratón de Brooklyn. Superó su sobrepeso, superó la ansiedad que el huracán generó en su vida y superará esto.
“Estoy muy emocionada, es mi primera media maratón y tengo muchas ganas”, se despide.