Trump amenaza con reducir ayuda a países que envían ‘animales’ de MS-13 a EEUU
Sin nombrarlas, afirmó que algunas naciones promueven la innmigración ilegal de sus pandilleros
Al visitar Long Island el miércoles, el presidente Donald Trump se dijo dispuesto a reducir la ayuda a los países que no impiden la migración de integrantes de la Mara Salvatrucha (MS-13), y confió en que su gobierno erradicará la violencia de esa pandilla trasnacional.
Trump volvió a llamar “animales” a los integrantes de la MS-13, a la que describió como “una pandilla sin piedad”. Esa afirmación fue respaldada, entre otros de los asistentes, por el director Adjunto del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), Thomas Homan, quien advirtió que los animales “matan para sobrevivir”, mientras la “MS-13 mata por deporte”.
“Vamos a ver la estructura completa de ayuda y va a cambiar muy radicalmente”, afirmó Trump al visitar el Centro de Seguridad Nacional en Brentwood, localidad de Long Island, una de las zonas más afectadas por la presencia de la MS-13.
Trump encabezó una mesa redonda en la que, junto a autoridades federales y locales, congresistas, familiares de víctimas de las pandillas y algunos lugareños, abordó la lucha contra las pandillas y el tema migratorio.
El presidente se quejó que en otros países “no quieren a la gente” que están recibiendo deportada de Estados Unidos, y señaló que en muchas ocasiones estos regresan.
“Creo que no es difícil (parar flujo de gente). Te dan a entender que están intentando pararlo. No lo están parando, están fomentándolo a que la gente salga”, subrayó.
Anticipó que trabajarán “en algo para que cada vez que alguien de determinado país” haya entrado de forma ilegal a Estados Unidos se le descontará “una gran cantidad de dinero” de ayuda.
Consideró además que si tuvieran “leyes apropiadas no estarían volviendo aquí como lo hacen, y cuestionó la práctica conocida como “atrapar y soltar” a los inmigrantes previa firma de un papel “que no tiene significado ni validez”.
También defendió un cambio en las leyes para resolver las lagunas que pueda haber frente a la migración y avanzar en el combate a las pandillas, a las que culpó de haber convertido áreas pacíficas en “zonas de matanza”.
Homan destacó que bajo el liderazgo de Trump han “duplicado” los arrestos de integrantes de pandillas, con 796 en el primer año del actual gobierno, y resaltó el trabajo que desarrollan de forma coordinada con las autoridades salvadoreñas.
La MS-13, nacida entre los años 80 y 90 en Los Ángeles (California) junto a su rival, el Barrio 18, se ha esparcido a Centroamérica y otros lugares.
Según el gobierno estadounidense, hay alrededor de 30 mil miembros en todo el mundo, de los cuales 10 mil están en EEUU, especialmente 2 mil en Long Island.
Long Island es una de las áreas con mayor presencia de la (MS-13) en Estados Unidos, donde se le atribuyen al menos 25 asesinatos en los últimos dos años. El grupo está asociado con reclutar jóvenes, mayormente de origen latino.
El fiscal general adjunto John P. Cronan, de la División Criminal del Departamento de Justicia, citó durante su intervención versiones de que está entrando “gente nueva” de esta pandilla desde El Salvador, y alertó que incluso están infiltrando escuelas.
En su relato, que incluyó casos de varios sujetos capturados y procesados por la justicia estadounidense, aludió a la “brutalidad” de estas organizaciones, y las acusó de violar y asesinar a sus víctimas -entre ellos de pandillas rivales o sus propios integrantes- con machetes, cadenas, cuchillos y armas de fuego.
Al encuentro, en el que los aplausos rompieron en varias ocasiones el protocolo, también asistieron la secretaria del Departamento de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, y el vicefiscal general, Rod Rosenstein, entre otros.
Afuera, unas 50 personas protestaron la presencia del mandatario.
Es la segunda ocasión que Trump visita Long Island, donde ya estuvo en julio del año pasado, también promocionando su lucha contra la MS-13.