Las dos fugas de “El Chapo Guzmán” que puso en jaque al gobierno de Fox y Peña Nieto
Joaquín Guzmán Loera y sus escapes en México, pero en Estados Unidos fue enjuiciado
El Chapo Guzmán. Crédito: Getty
MÉXICO – Joaquín “El Chapo” Guzmán, declarado culpable en una corte de Brooklyn se convirtió en toda una leyenda en México por protagonizar dos fugas de penales de máxima seguridad. La primera en el gobierno de Vicente Fox y la segunda, en la administración de Enrique Peña Nieto.
El líder del cártel de Sinaloa fue capturado por primera vez en 1993 luego del fuego cruzado entre su gente y los integrantes del cártel de los Arellano Félix que terminó con la vida del cardenal de Guadalajara Juan Jesús Posadas Ocampo.
Guzmán Loera fue acusado de varios cargos de narcotráfico.
“El Chapo” fue capturado en Guatemala y trasladado al penal de Almoloya de Juárez, en el Estado de México, ahora llamado “El Altiplano”.
Pero después un fallido intento de fuga, Guzmán Loera fue traslado otra cárcel de máxima seguridad en el estado de Jalisco. Fue ahí, en la cárcel de Puente Grande que el capo mexicano pasó alrededor de cinco años.
Ya que fue el 19 de enero del 2001, cuando Vicente Fox había recién llegado a la presidencia de México, que el narcotraficante mexicano se fugó del penal de máxima seguridad, que después se supo fue a través de un carrito de lavandería y contó con la complicidad de uno de los trabajadores.
Así pasó prófugo y a salto de mata durante casi 13 años. Su emporio del narcotráfico crecía a niveles insospechados. Pero el capo mexicano fue recapturado en 22 de febrero del 2014, cuando el presidente Enrique Peña Nieto tenía más de un año en el poder.
“El Chapo” fue recluido en el penal de máxima seguridad del Altiplano, en el Estado de México, desde donde planeó su segunda fuga.
Pasó solo 17 meses recluido, ya que el 11 de julio del 2015, el capo mexicano se fugó a través de un túnel que mandó construir desde su celda a una casa cercana al penal.
Pero esa “libertad” le duró hasta enero del 2016, cuando fue capturado en el estado de Sinaloa.
En el 2017 fue extraditado a Estados Unidos donde fue enjuiciado por narcotráfico y declarado culpable este martes.
